Solidaridad caída del cielo

Un helicóptero levantó ayer un tremendo torbellino de solidaridad en la Casa de Campo. Ayuda en Acción (organización no gubernamental de ayuda al Tercer Mundo con más de 1.000 voluntarios en España) logró reunir a paracaidistas, títeres, deportistas y a miles de madrileños en apoyo de la rehabilitación de Rumiquincha, un pueblecito de Ecuador destrozado por los terremotos.El torbellino que originó el aterrizaje de un helicóptero del Ejército español -"como los de Vietnam", según gritó un niño- acaparó todas las miradas. Aparte, los niños aprendieron jugando que sus amigos del Tercer Mundo care...

Un helicóptero levantó ayer un tremendo torbellino de solidaridad en la Casa de Campo. Ayuda en Acción (organización no gubernamental de ayuda al Tercer Mundo con más de 1.000 voluntarios en España) logró reunir a paracaidistas, títeres, deportistas y a miles de madrileños en apoyo de la rehabilitación de Rumiquincha, un pueblecito de Ecuador destrozado por los terremotos.El torbellino que originó el aterrizaje de un helicóptero del Ejército español -"como los de Vietnam", según gritó un niño- acaparó todas las miradas. Aparte, los niños aprendieron jugando que sus amigos del Tercer Mundo carecen de cosas que ellos ven como cotidianas.

"A este poblado le falta un puente, una escuela y una fuente para beber", decía un zagal frente a un gran rompecabezas de Rumiquincha. "Echa una moneda papá" le pidió. Otros 2.000 niños participaron en una carrera en la que no contaban "ni vencedores ni vencidos, sino los niños del Tercer Mundo", como anunciaban los altavoces en la línea de salida. "Hemos corrido por los niños del Tercer Mundo, porque todos tenemos que ser iguales" explicaron casi al unísono Javi y Alberto, ambos de 12 años y con la cara sonrojada por el esfuerzo. Otros niños de Valladolid, Valencia, Segovia, Sant Coloni (Barcelona) y Alcalá de Henares corrieron a la misma hora por la misma causa.