La 'temperatura' del país en 40 cuestiones

Desde mayo de 1979, el Centro de Investigaciones Sociológicas plantea cada mes una serie de 40 preguntas a 2.500 personas repartidas por toda España para conocer la temperatura del país. La social y la política. Entre 15 y 20 de esas cuestiones tenían hasta ahora un claro contenido político. Tras la pregunta de rigor -"Si mañana se convocaran las elecciones generales, ¿por qué partido votaría usted?"- se sucedían una cadena de cuestiones como, por ejemplo: "¿Cuál es la aprobación de la labor del presidente del Gobierno?", "¿Qué confianza le merece el jefe del Ejecutivo?", "¿Aprueba uste...

Desde mayo de 1979, el Centro de Investigaciones Sociológicas plantea cada mes una serie de 40 preguntas a 2.500 personas repartidas por toda España para conocer la temperatura del país. La social y la política. Entre 15 y 20 de esas cuestiones tenían hasta ahora un claro contenido político. Tras la pregunta de rigor -"Si mañana se convocaran las elecciones generales, ¿por qué partido votaría usted?"- se sucedían una cadena de cuestiones como, por ejemplo: "¿Cuál es la aprobación de la labor del presidente del Gobierno?", "¿Qué confianza le merece el jefe del Ejecutivo?", "¿Aprueba usted la actuación del líder de la oposición?". Asimismo se solicitaba la valoración de los principales líderes políticos nacionales. Todas estas cuestiones se han suprimido.También se inquiría hasta ahora, aunque más ocasionalmente, por la valoración de los sondeados sobre cada uno de los componentes del Consejo de Ministros y por los distintos partidos políticos. Prácticamente cada mes se planteaba también una visión "retrospectiva" y otra "prospectiva" de la situación política con respecto a la de un año antes o la de 12 meses más tarde.

Combinando las respuestas sobre el grado de satisfacción con la actuación del Gobierno y la del crédito que se concedía a la oposición, los técnicos del CIS podían medir el nivel de "desafección" política del país. Si la mayoría de los ciudadanos opinaban mal del Gobierno y de la oposición, "el clima de insatisfacción" era más palpable. Si el momento económico era boyante, ambas cuestiones eran respondidas mayoritariamente en sentido positivo.