Dos jugadas aisladas

Efectividad. La habilidad de Suker para desnivelar en el uno contra uno en un palmo de terreno. El oportunismo de Raúl para alcanzar un balón imposible que había errado un compañero. La potencia de Roberto Carlos, bien aprovechada por el croata ante el despiste de la zaga espanyolista. Dos intervenciones de Illgner. Esto fue suficiente para que el Madrid superara al Espanyol en el marcador. En lo demás, todo fue igual.Equilibrio. El partido fue bastante equilibrado. El Espanyol controló el balón en el centro del campo y lo tuvo en su poder más que el Madrid. También gozo de varia...

Efectividad. La habilidad de Suker para desnivelar en el uno contra uno en un palmo de terreno. El oportunismo de Raúl para alcanzar un balón imposible que había errado un compañero. La potencia de Roberto Carlos, bien aprovechada por el croata ante el despiste de la zaga espanyolista. Dos intervenciones de Illgner. Esto fue suficiente para que el Madrid superara al Espanyol en el marcador. En lo demás, todo fue igual.Equilibrio. El partido fue bastante equilibrado. El Espanyol controló el balón en el centro del campo y lo tuvo en su poder más que el Madrid. También gozo de varias ocasiones, pero falló. Desde luego, la diferencia en el marcador no se reflejó sobre el terreno. Dos jugadas aisladas le sirvieron al Madrid para afrontar el partido con tranquilidad.

Impotencia. Le fue imposible al Madrid jugar con comodidad. Demasiadas imprecisiones en el pase motivadas por la presión de los hombres del Espanyol, muy bien colocados. En vista de su impotencia se vio obligado a cerrar líneas y esperar alguna contra efectiva. No mereció el Espanyol que se acabara el partido tan pronto. Lardín pudo continuar su racha goleadora con el Madrid.

Todo igual. El Madrid no acaba de jugar bien. Debería intentar mantener más el balón en su poder. Esperar la incorporación de los laterales y generar espacios que puedan ser aprovechados por los centrocampistas le facilitaría las cosas. Seedorf pierde el sitio con facilidad y Sanchis no está capacitado para hacer de pivote en la traslación del balón. Generalmente son los delanteros los que crean las ocasiones, cuando tendrían que ser los que rematan.

La selección. Me alegré mucho cuando Clemente convocó a Guardiola. Siempre jugó igual, quizá ahora se emplee más a fondo en tareas defensivas al no tener tanto la posesión del balón, como en la época de Cruyff. Ahora también me alegro de la incorporación de Raúl, que ya la pasada campaña se hizo acreedor de ello. Y, por supuesto, me alegraré cuando lo haga con Iván de la Peña. Jóvenes todos ellos, pero con experiencia.