La madre Teresa, algo mejor, bendice a sus monjas

La madre Teresa de Calcuta, de 85 años, con respiración artificial desde el pasado martes, pudo ayer bendecir a varias de sus monjas que la visitaron. "Levantó la mano suavemente", relató S. K. Sen, portavoz de los doctores del hospital Woodlands.El doctor reconoció que la enferma había experimentado "una leve mejoría, aunque está aún grave. No podemos decir que esté fuera de peligro hasta que podamos quitarle la respiración asistida. Aún no es capaz de respirar, pero confiamos en que mañana pueda hacerlo y la mejoría se consolide apreciablemente". El parte médico de la tarde concretó que ayer...

La madre Teresa de Calcuta, de 85 años, con respiración artificial desde el pasado martes, pudo ayer bendecir a varias de sus monjas que la visitaron. "Levantó la mano suavemente", relató S. K. Sen, portavoz de los doctores del hospital Woodlands.El doctor reconoció que la enferma había experimentado "una leve mejoría, aunque está aún grave. No podemos decir que esté fuera de peligro hasta que podamos quitarle la respiración asistida. Aún no es capaz de respirar, pero confiamos en que mañana pueda hacerlo y la mejoría se consolide apreciablemente". El parte médico de la tarde concretó que ayer no se habían presentado problemas cardiacos, aunque el ritmo seguía siendo inestable.

Los facultativos habían señalado horas antes que ayer era un "día crucial, porque debe comprobarse si responde o no al tratamiento". Los doctores siguieron mostrándose cautelosos por la tarde. A las puertas del convento de la Caridad se agrupa la multitud, y a las oraciones de las monjas católicas se han unido incluso hindúes y musulmanes. "Un maulvi [mulah, religioso musulmán] entró en la capilla y sé arrodilló", dijo la hermana Priscila, portavoz de la orden. Un centenar de voluntarios intenta mantener el orden en el acceso a los servicios religiosos y brindar in formación a los interesados.