PSOE e IU acusan al Gobierno de Aznar de improvisación y contradicciones durante su primer mes de funcionamiento

La izquierda parlamentaria, PSOE e Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya, coincide en su análisis crítico respecto al primer mes de gobierno de José María Aznar. Por su lado, los nacionalistas hacen bloque y se muestran bastante más benevolentes. "Improvisación, titubeos, contradicciones", dicen PSOE e IU. "Algunos despistes" pero buenas intenciones "y, sobre todo hay que darles tiempo", opinan peneuvistas y nacionalistas catalanes.Los grupos parlamentarios señalan de antemano que al Gobierno hay que concederle los 100 días de gracia clásicos, pero creen conveniente hacer un primer balance...

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La izquierda parlamentaria, PSOE e Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya, coincide en su análisis crítico respecto al primer mes de gobierno de José María Aznar. Por su lado, los nacionalistas hacen bloque y se muestran bastante más benevolentes. "Improvisación, titubeos, contradicciones", dicen PSOE e IU. "Algunos despistes" pero buenas intenciones "y, sobre todo hay que darles tiempo", opinan peneuvistas y nacionalistas catalanes.Los grupos parlamentarios señalan de antemano que al Gobierno hay que concederle los 100 días de gracia clásicos, pero creen conveniente hacer un primer balance a punto de cumplirse el primer mes de la presidencia de Aznar. Desde la dirección del PSOE, Cipriá Ciscar, secretario de Organización, afirma tajante que ha habido "improvisación, titubeos y contradicciones". El presidente del Grupo Socialista, Joaquín Almunia, tiene estructurada la labor del Gobierno popular en varios apartados en los que observa luces y sombras.

Almunia no tiene dudas en calificar de "gran estafa política" el haber dicho a los ciudadanos que podían prescindir de 5.000 altos cargos, cuando "no tienen manera" de encontrar a más de un centenar. En el terreno de las búsquedas, tercia Ciscar, los populares persiguen el hallazgo de "agujeros" cuando, a su juicio, la única oquedad "es la del túnel de Sóller", en alusión al escándalo balear que provocó la dimisión del presidente popular Gabriel Cañellas.

Desorientación, desconcierto e improvisación son también los términos que utiliza la portavoz de IU, Rosa Aguilar. Coincide en muchas de sus apreciaciones con los socialistas, aunque va algo más allá al prever una política "extremadamente dura" que hará retroceder el Estado de bienestar que "han construido todos los españoles".

Los nacionalistas catalanes, dada su condición de grupo parlamentario que sustenta al Gobierno, se muestran mucho más benévolos. El portavoz parlamentario de CiU, Joaquim Molins, pide tiempo para que el PP pueda ir demostrando que cumple sus compromisos.

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