Empiezan dos años de cortes por obras en la Castellana

La obra que hará coincidir bajo una nueva estación (Gregorio Marañón) dos nuevos tramos de las líneas 10 y 7 del metro comenzó ayer. Y los primeros problemas para los automovilistas surgen hoy: los cinco carriles centrales de subida -dirección plaza de Castilla- de la Castellana, desde la plaza de San Juan de la Cruz hasta el paso elevado de Raimundo Fernández Villaverde, quedarán cortados al tráfico durante los próximos meses. Desde ahora serán territorio exclusivo de los operarios y técnicos de la Comunidad de Madrid y del topo, esto es, la máquina gigante que excava los túneles que serán tr...

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La obra que hará coincidir bajo una nueva estación (Gregorio Marañón) dos nuevos tramos de las líneas 10 y 7 del metro comenzó ayer. Y los primeros problemas para los automovilistas surgen hoy: los cinco carriles centrales de subida -dirección plaza de Castilla- de la Castellana, desde la plaza de San Juan de la Cruz hasta el paso elevado de Raimundo Fernández Villaverde, quedarán cortados al tráfico durante los próximos meses. Desde ahora serán territorio exclusivo de los operarios y técnicos de la Comunidad de Madrid y del topo, esto es, la máquina gigante que excava los túneles que serán transitados por el metro. Los responsables calculan que todo estará terminado en dos años.Los coches en dirección a la plaza Castilla deberán rodar desde hoy por los cuatro carriles laterales. PASA A LA PÁGINA 4

Las obras pararán para que pasen los coches cuando el atasco sea "enorme"

VIENE DE LA PÁGINA 1Entre estos cuatro carriles se cuentan los reservados para los autobuses y el que hasta ahora se empleaba para aparcar. Mientras todo acaba, según confirmaron ayer en el Ayuntamiento de Madrid, este organismo y los encargados de los trabajos estarán en contacto permanente para evitar que los atascos se conviertan en algo invivible para los conductores.

Los responsables ya han pensado en soluciones concretas si el número de coches excede lo previsible: "Por ahora, los carriles en dirección a la plaza de Cibeles no se van a cerrar, y además, si el embotellamiento es enorme, se parará la obra durante media hora para que pasen los coches durante este tiempo", dijo ayer un portavoz municipal.

El Ayuntamiento aprovechará que el barrio estará patas arriba para excavar a lo largo de estos dos años dos túneles en Guzmán el Bueno y en Ríos Rosas.

Las líneas que confluirán en el futuro en la plaza, de Gregorio Marañón son las siguientes: la 7, que avanzará desde la avenida de Américará hasta Arroyo del Fresno, y la 10, que se ampliará desde Alonso Martínez a Nuevos Ministerios. En total, 20 k¡lómetros nuevos de red subterránea.

De todo esto ya avisó el alcalde José María Álvarez del Manzano hace 15 días: "Vamos a procurar molestar a los vecinos lo menos posible, pero hay que tener en cuenta que este corte va a tener una duración larga; servirá para que los madrileños tengan más movilidad".

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