Perote fracasa en su intento por deshacerse del juez militar

El ex jefe de la Agrupación Operativa del Cesid, Juan Alberto Perote, ha fracasado en su intento por deshacerse del juez militar Jesús Palomino Yébenes, que lo procesó por sustracción de documentos secretos y lo mantiene en prisión preventiva desde hace cinco meses.

El Tribunal Militar Central, en una resolución dictada el pasado lunes, ha rechazado la admisión a trámite de la denuncia presentada por Perote contra Palomino, al que acusó de omisión del deber de perseguir delitos, prevaricación y falsedad.

El tribunal no sólo rechaza la denuncia, sino que acusa a Perote y a su ...

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El ex jefe de la Agrupación Operativa del Cesid, Juan Alberto Perote, ha fracasado en su intento por deshacerse del juez militar Jesús Palomino Yébenes, que lo procesó por sustracción de documentos secretos y lo mantiene en prisión preventiva desde hace cinco meses.

El Tribunal Militar Central, en una resolución dictada el pasado lunes, ha rechazado la admisión a trámite de la denuncia presentada por Perote contra Palomino, al que acusó de omisión del deber de perseguir delitos, prevaricación y falsedad.

El tribunal no sólo rechaza la denuncia, sino que acusa a Perote y a su letrado, Jesús Santaella, de realizar "un ejercicio de voluntarismo no exento de torcido designio que esta Sala debe repeler contundentemente".

Perote ha seguido paso a paso la estrategia marcada por Mario Conde, con quien comparte al abogado Santaella. Al igual que el ex banquero ha intentado por todos los medios apartar al juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón de la instrucción del caso Banesto, el ex agente secreto ha perseguido con ahínco evitar que el juez Palomino siga instruyendo la denuncia presentada contra él en la jurisdicción militar.

El pasado 5 de enero, Santaella planteó la recusación de Palomino y, al mismo tiempo, le acusó de no haber perseguido las supuestas coacciones denunciadas por uno de los testigos del caso; de haberse inventado que Perote pidió una prórroga para devolver los papeles del Cesid cuando le fueron requeridos por el juez, o de negarse a entregarle copia de una resolución en la que recordaba al procesado su deber de guardar secreto, para que éste pudiese entregarla al juez Garzón, ante el que declaró en relación con los GAL.

Recusación rechazada

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En un auto dictado hace dos semanas, el Tribunal Militar Central rechazó ya la recusación, calificándola de extemporánea, pues se basaba en una denuncia que ni siquiera había sido admitida a trámite. Precisamente, la admisión de la denuncia, base de la posible recusación, es la que se sometió a antejuicio el pasado 7 de febrero y ahora ha sido definitivamente rechazada."El hecho de que el juez instructor de un sumario adopte determinadas resoluciones que no satisfagan o convengan a los intereses de algunas de las partes no puede, por sí mismo, criminalizar la acción judicial; incluso en el caso de que ésta sea desacertada o definitivamente errónea", advierte el tribunal.

La resolución recuerda que algunas de las resoluciones del juez, que "al parecer tanto perjudicaban los intereses de su patrozinado", ni siquiera fueron recurridas por Santaella para que el tribunal las revocara, "lo que da pie a no descartar una intención sesgada del denunciante".

Una vez resuelto este incidente, Palomino podrá concluir sin más dilaciones el sumario abierto contra Perote el pasado junio.

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