Marc Girardelli aumenta su leyeda

El esquiador más completo de los últimos años dominó la combinada

El luxemburgués de origen austriaco Marc Girardelli tocó quizá su último cielo en Granada. No podía hacerlo en mejor sitio ni Sierra Nevada quedar más grabada para la historia. El esquiador más completo de los últimos años y con el palmarés más deslumbrante, aumentó su leyenda ganando su tercer título mundial en la combinada. El no ruego Lasse Kjus, líder de la Copa del Mundo, que esta temporada había roto su racha de segundos puestos, tuvo que conformarse con volver a ser el Poulidor de la nieve pese a hacer el mejor tiempo en el descenso. Girardelli es un auténtico monumento del esquí...

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El luxemburgués de origen austriaco Marc Girardelli tocó quizá su último cielo en Granada. No podía hacerlo en mejor sitio ni Sierra Nevada quedar más grabada para la historia. El esquiador más completo de los últimos años y con el palmarés más deslumbrante, aumentó su leyenda ganando su tercer título mundial en la combinada. El no ruego Lasse Kjus, líder de la Copa del Mundo, que esta temporada había roto su racha de segundos puestos, tuvo que conformarse con volver a ser el Poulidor de la nieve pese a hacer el mejor tiempo en el descenso. Girardelli es un auténtico monumento del esquí al que sólo ha faltado el triunfo olímpico. Su carrera estuvo marcada por la rebeldía desde sus comienzos cuando su padre se enfadó con el equipo austríaco por no contar con él y cumplió su amenaza de nacionalizar luxemburgués a su hijo. El conflicto le impidió participar en los Juegos de Sarajevo 84, cuando era primero y tercero en las clasificaciones de eslalon y gigante en la Copa del Mundo, y hubiese subido con seguridad a algún podio. Después, no estuvo bien en Calgary 88 y las dos medallas de plata en el eslalon y el supergigante de Albertville 92 fueron una pobre renta si se compara su impresionante historial: cinco Copas del Mundo, 46 triunfos parciales y 12 medallas, cuatro de oro (las tres de combinada y la del eslalon de Saalbach 91), en seis Campeonatos del Mundo y en todas. las especialidades. Todo un decatloniano del esquí. Desde su medalla de plata en el eslalon y la de bronce en el gigante de Bormio 85, han pasado 11 años y sigue en la cumbre.Sin embargo, camino ya de los 33 años, que cumplirá el 18 de julio, no es el de antes y su temporada en pruebas parciales de la Copa del Mundo así lo demuestran. Por ello tiene aún más mérito. Él mismo reconoció ayer que lleva una campaña desastrosa y que el título mundial ha demostrado que es un combatiente y que aún puede estar en la élite. En eslalon su mejor actuación fue un sexto puesto en Veysonnaz (Suiza); en gigante, un noveno en Adelboden (Suiza); en descenso, lan 16º en Bormio y en supergigante, apenas dos 30º en Valloire (Francia) y en Garmisch (Alemania). Incluso, en Sierra Nevada sólo ha sido 18º tanto en el supergigante como en el descenso. Consciente de sus limitaciones ha enfocado su campaña a la combinada, la única modalidad donde su polvalencia podía expresarse aún a gran nivel.

Tras pasar el trago del eslalon el martes ("apenas veía la segunda puerta en la parte de arriba con la nieve que caía", dijo), fue todo más fácil en el descenso. Su carrera en el cómodo trazado de la pista Veleta lo resumió rápidamente: "Me agaché en la salida y me levanté en la meta". Fue cuarto, tras Kjus, Mader y Aamodt, que había perdido demasiado tiempo en el eslalon. A Kjus, líder de la Copa de Mundo absoluta, tampoco le bastó ser el mas rápido ayer. No estuvo bien en la prueba de habilidad y en la suma final quedó otra vez segundo, su sino. El campeón olímpico y mundial de la especialidad, ironizó cuando se le preguntó: "Es terrible y, además, que me haya ganado un viejo como Girardelli".

Clasificación: 1. Girardelli (Luxemburgo), 3.31.95 (50.06 + 48.93 del eslalon y 1.52.96 del descenso). 2. Kjus (Noruega), 3.32.20 (51.78 + 48.60 y 1.51.82). 3. Mader (Austria), 3.32.93 (51.62 + 48.93 y 1.52.38).

El reto del Himalaya

"Nadie me ha ofrecido otro trabajo, así que tendré que seguir", comentó ayer Marc Girardelli tras ganar el oro de la combinada. El hombre independiente, qué se entrena en solitario, no tiene previsto aún poner fin a su carrera. "Debería continuar si gano medallas, ¿no?". A sus 32 años, este luchador incluso se plantea nuevos retos. Nada menos que escalar el Shisha Pangma, uno de los ochomiles del Himalaya, de 8.021 metros, y bajar con esquíes hasta el primer. campamento, a unos 5.700 metros. "Es posible", dice. "La montaña es muy interesante y difícil, pero menos que otras de la zona". La aventura será entre primeros de abril y mediados de mayo.En principio pensaba ir con un grupo de amigos montañeros a. hacer trekking al Tíbet, pero le convencieron para el cambio. "La gran escalada me fascina", dice el campeón mundial, al que no le preocupa que su única gran experiencia de escalada haya sido subir al Monte Rosa, en los Alpes, con sólo 4.600 metros. "No tengo que seguir un entrenamiento especial", comenta. "Me he dado cuenta de que los esquiadores nos preparamos de forma muy parecida a los escaladores. Además, subir a una cumbre de más de 8.000 metros lo tienes que hacer siempre una primera vez, no valen las pruebas". Girardelli piensa hacerlo sin oxígeno. Pero la atracción es para él de medalla de oro.

El milagro español

Después de 10 días sin español alguno compitiendo, aparecerá, al fin, nuestra raquítica representación en busca del milagro. La nulidad del esquí hispana ha impedido que hubiera ni un solo participante en las pruebas rápidas o incluso en la combinada como preparación para metas mayores. Ya se hizo en los Juegos de Lillehammer 94 y se alcanzó el ridículo. Hoy es la primera y mejor oportunidad en el gigante femenino (9.30 horas, primera manga y 13.00, segunda). La gran lucha deberá estar entre las alemanas Ertl y Seizinger, las italianas Compagnoni y Panzanini, la austriaca Wachter, la sueca Hansson y la Suiza Nef.Las españolas Ainhoa Ibarra, Ana Galindo y María José Rienda intentarán por enésima vez la hazaña. Su mejor resultado esta temporada en la Copa del Mundo fue el 14º puesto de Ibarra y Galindo en Veysonnaz (Suiza), el 21 de diciembre. Los otros registros no bajaron del vigésimo. Ibarra, la más veterana y con mejores resultados en su carrera, es actualmente 29ª de la lista mundial de gigante, Galindo, 40ª y Rienda, 42ª. En un Mundial puede ocurrir cualquier sorpresa, pero el milagro sólo parece reservado a los mejores. Rondar el décimo lugar será suficiente para que dé sal' tos una Federación, Española ruinosa que ha sido incapaz de gestar siquiera una representación digna para unos campeonatos organizados en España.

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