Gofread salva al Barça sobre la bocina

Godfread aferró a su equipo a la Liga Europea en el. último segundo de un partido que viajó de un lado para otro de forma vertiginosa. La última jugada y el palmeo del americano pusieron de relieve la forma agónica y épica con la que se llevó el Barcelona un triunfo vital en sus aspiraciones de clasificación para los cuartos de final. Como suele suceder cuando Barcelona y Buckler se enfrentan el partido fue muy abierto, muy dado a una ofensiva despiadada por ambos bandos. El Barcelona tuvo de su lado la pequeña dosis de fortuna que requería. Salva Díez personificó el cariz de los acontecimient...

Godfread aferró a su equipo a la Liga Europea en el. último segundo de un partido que viajó de un lado para otro de forma vertiginosa. La última jugada y el palmeo del americano pusieron de relieve la forma agónica y épica con la que se llevó el Barcelona un triunfo vital en sus aspiraciones de clasificación para los cuartos de final. Como suele suceder cuando Barcelona y Buckler se enfrentan el partido fue muy abierto, muy dado a una ofensiva despiadada por ambos bandos. El Barcelona tuvo de su lado la pequeña dosis de fortuna que requería. Salva Díez personificó el cariz de los acontecimientos. Lo hizo con un triple sobre la bocina del descanso: 50-51 y lo repitió con otro cuando la situación se le ponía fea al Barcelona: 76-77 a falta de tres minutos. Dio la sensación entonces que el Barcelona ya podía respirar tranquilo, máxime cuando instantes después Komazec cometió una inocente quinta personal y se abrió un hueco de ocho puntos: 85-77. Pero nadie contaba con Moretti. El alero italiano, con dos triples demoledores, inapelables, puso a su equipo al borde del triunfo: 87-88 a ocho segundos para el final. El Barcelona acarreó en ese intervalo el balón hasta debajo del aro italiano pero allí Jiménez cedió de forma deficiente a Karnisovas y este efectuó un tiro, por llamarlo de alguna manera, como buenamente pudo. Fue en ese instante, justo cuando se agotaba el último segundo, cuando surgió el palmeo de Godfread.El Barcelona, y el Buckler pugnaron por ver quien apretaba más abarcando mucho. Ambos equipos están acostumbrados a buscar la entelequia del baloncesto total. Por más bajas que acumulen, por más debilidades que evidencien, tratan de ganar los partidos a base de plantar batalla en todos los terrenos. El espectador lo agradece. Hay puntos, cambios tácticos constantes y cientos de detalles sutiles que son susceptibles de variar el rumbo de los acontecimientos. Los vaivenes en el marcador también fueron notables.

El croata Komazec fue quien tiró primero del grupo italiano. El Barcelona aprovechó a la perfección un error de planteamiento del técnico del Buckler que hizo que Komazec fuera quien se encargara del marcaje de Karnisovas. El lituano inició el tirón azulgrana: 8-0. La estrella del Buck1er lo es de cara al aro rival pero de espalda al suyo se convierte en un jugador del montón, que además de no poder con Karnisovas, sumó dos faltas en un par de minutos. El Barcelona, en cambio, utilizó a Jiménez para frenar de salida a Koinazec, cosa que logró. Pero cuando Bucci rectificó, cambió el rumbo de los acontecimientos de forma radical. Moretti se emparejó con Karnisovas y la superioridad azulgrana ya tan sólo se puso en evidencia cuando sumó su tercer y su quinto triple: 18-11 y 35-30. El Barcelona vivió de ésos triples y de la astucia de Godfread para separarse de los 213 centímetros de Binelli y superarle con tiros a media distancia o ganchos. Sin embargo, el Barcelona no acertó a aprovechar la escasa utilización del cuatro italiano, De Piccofi, sustituto de Carera, que su vez se perfilaba como el sustituto del americano WoIridge, lesionado. Ferran podía haber explotado esa debilidad del Buckler pero apenas fue utilizado por Aíto, bien porque acaba de salir de una lesión, bien porque precisaba de la aportación defensiva de Jiménez.