Entrevista:

"Me parece mal el rechazo a los centros de metadona"

Hace una década, Antonio Alcalá, de 64 años, se dió de bruces con un problema que nunca hubiera supuesto: la adicción a las drogas de su hijo menor, de 18 años. Ni él ni su esposa sabían que hacer. Así que Antonio, decidido a coger el toro por los cuernos, acudió a la asociación Alad-Latina en busca de apoyo e información. Algo que en aquel entonces no era fácil de encontrar.Han Pasado diez años y su hijo falleció pero, a pesar del mazazo, él sigue luchando en la misma trinchera. Ahora es el presidente de, la Federación de Asociaciones de Asistencia a Familias de Toxicómanos (FERMAT) que desd...

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Hace una década, Antonio Alcalá, de 64 años, se dió de bruces con un problema que nunca hubiera supuesto: la adicción a las drogas de su hijo menor, de 18 años. Ni él ni su esposa sabían que hacer. Así que Antonio, decidido a coger el toro por los cuernos, acudió a la asociación Alad-Latina en busca de apoyo e información. Algo que en aquel entonces no era fácil de encontrar.Han Pasado diez años y su hijo falleció pero, a pesar del mazazo, él sigue luchando en la misma trinchera. Ahora es el presidente de, la Federación de Asociaciones de Asistencia a Familias de Toxicómanos (FERMAT) que desde ayer celebra sus segundas jornadas, sobre familia y drogodependencias en el Centro Cultural Puerta de Toledo.

El propósito de FERMAT es dar apoyo e información a las familias de los toxicómanos, a las que consideran una pieza básica para lograr su rehabilitación. "Es muy difícil que el drogadicto de sólo el paso de dejar el consumo y para ayudarle hay que saber", explica Alcalá.

Pregunta. ¿Cómo supo usted que su hijo era heroinómano?

Respuesta. Me lo dijo él mismo después de que un amigo suyo se lo contase también a su familia.

P. ¿Cuál fue su reacción?

R. El me aseguró que quería dejarlo y entonces yo le contesté que contaba con nosotros para ello,

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P. Pero sería muy duro.

R. Sí claro, no sabías ni que hacer. Además ves la ansiedad de tu hijo. Yo reconozco que he llegado a comprarle droga una vez, que debía esperar dos semanas para ingresar en una granja. Era una forma de tenerlo sujeto.

P. ¿La actitud de las familias ha cambiado mucho en esta década?

R. Ahora hay más información y también creo que las familias sienten menos, vergüenza por tener un hijo drogodependiente.

P. ¿Cómo influye el creciente consumo de cocaína y drogas de diseño?

R. A corto plazo parece que no hay problema por que el consumidor hace una vida normal de lunes a viernes. Pero sus efectos a largo plazo están por ver.

P. ¿Hay recursos institucionales suficientes?

R. Para ayudar a los drogodependientes sí, pero no para los padres.

P. ¿Qué le parecen las manifestaciones contra los centros de metadona?

R. Muy mal. La droga es un problema social que debemos resolver entre todos. Yo he vivido esas hostilidades. cuando se intentó abrir un Centro de Drogodependientes en Las Águilas. Hubo una reunión y los que estábamos a favor tuvimos que salir escoltados por la policía porque nos querían pegar.

Federación de Asociaciones de Asistencia a Familias de Toxicómanos (FERMAT), calle del Conde de RoManones, 9, 4º derecha. Teléfono 369 44 48.

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