Cartas al director

Crítico de toros

Soy un joven aficionado de 20 años de edad que lleva abonado a la plaza de toros de Las Ventas desde que tenía nueve y, aunque no, soy lector asiduo de su periódico, durante la feria, taurina de San Isidro¡ domo buen aficionado que soy, siempre leo, entre otras, las crónicas diarias de Joaquín Vidal de las corridas que se celebran en Las Ventas.Me sorprendo año tras año, y ése es el motivo de esta carta, de que un periódico de prestigio como es EL PAÍS, con un muy importante número de lectores, no cuente en su sección taurina con un cronista versado y competente en la materia, no sólo que ...

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Soy un joven aficionado de 20 años de edad que lleva abonado a la plaza de toros de Las Ventas desde que tenía nueve y, aunque no, soy lector asiduo de su periódico, durante la feria, taurina de San Isidro¡ domo buen aficionado que soy, siempre leo, entre otras, las crónicas diarias de Joaquín Vidal de las corridas que se celebran en Las Ventas.Me sorprendo año tras año, y ése es el motivo de esta carta, de que un periódico de prestigio como es EL PAÍS, con un muy importante número de lectores, no cuente en su sección taurina con un cronista versado y competente en la materia, no sólo que entienda de toros, sino que además refleje en sus crónicas lo que realmente pasó cada día en la plaza, sin apasionamientos, fobias personales o juicios de valor que con frecuencia confunden al lector no aficionado, o que lo es, y no ha visto la corrida. De forma resumida, un crítico taurino ecuánime, ponderado, veraz y, en suma, buen profesional, de los muchos que tenemos en España.-

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