Tribuna:

Credibilidad

La Bolsa española consiguió ayer un nuevo máximo anual al situar el índice de Madrid en el 306,73%. Esta nueva subida tiene el mérito de haberse logrado al pesar de una retirada de beneficios de Wall Street, mercado que llegó a perder hasta 22 puntos. A priori, el mercado, parece haber superado algunas dependencias que le restaban capacidad de maniobra, como son la agotadora tensión política o la inercia de los grandes mercados.La contratación en esta sesión fue de 38.000 millones de pesetas efectivas y sin aplicaciones notables, lo cual es un buen indicador de cara a las pretensiones de durac...

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La Bolsa española consiguió ayer un nuevo máximo anual al situar el índice de Madrid en el 306,73%. Esta nueva subida tiene el mérito de haberse logrado al pesar de una retirada de beneficios de Wall Street, mercado que llegó a perder hasta 22 puntos. A priori, el mercado, parece haber superado algunas dependencias que le restaban capacidad de maniobra, como son la agotadora tensión política o la inercia de los grandes mercados.La contratación en esta sesión fue de 38.000 millones de pesetas efectivas y sin aplicaciones notables, lo cual es un buen indicador de cara a las pretensiones de duración la actual tendencia de los precios. Las recuperaciones de la peseta y del mercado de deuda muestran, asimismo, un cambio de orientación en la apreciación de la situación interna por la inversión internacional.

La jornada, llena de alternativas, ofreció una diferencia de hasta 4,65 puntos entre los niveles máximo y mínimo del día, aunque al final se quedó en un término medio al ganar 2,42 puntos, un 0,8%, en línea con los mejores re sultados de los mercados europeos. El Dow Jones cerró con 4.680, 60 puntos, 21,79 menos que el día anterior.

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