La peseta gana un 1,4% con el marco y roza el cambio previo a la devaluación

La peseta consolidó ayer con firmeza los avances de los últimos días y rozó el nivel previo a la devaluación del 6 de marzo (88,40). La moneda española logró cerrar en Europa en torno a las 88,90 pesetas por marco, con una apreciación de un 1,41%, contagiada de] aumento tanto de las divisas europeas más vulnerables como del dólar frente al marco. La tranquilidad de los mercados y la fuerte demanda estacional de pesetas por la llegada de las vacaciones contribuyeron a la recuperación. La debilidad del dólar se ha aislado en su tipo de cambio con la moneda japonesa, frente a la que ayer perdió u...

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La peseta consolidó ayer con firmeza los avances de los últimos días y rozó el nivel previo a la devaluación del 6 de marzo (88,40). La moneda española logró cerrar en Europa en torno a las 88,90 pesetas por marco, con una apreciación de un 1,41%, contagiada de] aumento tanto de las divisas europeas más vulnerables como del dólar frente al marco. La tranquilidad de los mercados y la fuerte demanda estacional de pesetas por la llegada de las vacaciones contribuyeron a la recuperación. La debilidad del dólar se ha aislado en su tipo de cambio con la moneda japonesa, frente a la que ayer perdió un 3%, hasta un mínimo, de 80,15 yenes. ,

La peseta cotizó ayer a su valor más alto frente al marco desde que se devaluara un 7% dentro del Sistema Monetario Europeo. A 88,90 pesetas por marco -su cierre ayer en Europa-, la moneda española está depreciada un 4,5% sobre el nuevo cambio central de 85,07 pesetas por marco que tiene en el SME y muy cerca de las 88,40 unidades a las que cotizaba antes de modificar sus bandas de fluctuación.En una semana, la moneda española ha ganado tres pesetas con el marco. Su recuperación está en sintonía con la del resto de las monedas europeas llamadas periféricas (fuera del área marco), castigadas desde principios de año por la debilidad del dólar -o fortaleza del marco-. La reciente bajada de los tipos de interés alemanes, que en su día (30 de abril) apenas ayudó a dichas divisas, ha permitido a algunos. de los países con monedas débiles, especialmente a Francia, bajar sus intereses una semana más tarde, "en una muestra de confianza que el mercado ha recibido muy bien", indica Juan Pérez Campanero, economista jefe de J.P. Morgan.

En este contexto de rebajas generalizadas de los intereses que ayudaron a las monedas europeas a desligarse de la debilidad del dólar a finales de la semana pasada, el mercado ha recibido bien la firmeza del Banco de España, que ha mantenido el precio del dinero intacto tras subirlo en dos ocasiones este año. Por un momento el mercado se mostró preocupado de que España se animara a bajar también los intereses después de que el secretario de Estado de Economía, Alfredo Pastor, señalara que había margen para hacerlo tras el recorte alemán. Pero a diferencia de Francia, Dinamarca o Bélgica, subieron sus tasas para ayudar a sus monedas en plena tormenta monetaria, la autoridad monetaria española los había aumentado para contrarrestar, en enero, el impacto del aumento de los impuestos indirectos en los precios y, en marzo, el de la devaluación.

La fuerte demanda estacional de pesetas con la llegada del turismo en estas fechas ha sido también una ayuda importante, especialmente notable en un momento en que el volumen del mercado, en estos días de vacaciones, es muy escaso. "Si hay un factor estacional en favor de la peseta, nadie se atreve a apostar en su contra cuando el volumen de mercado es muy estrecho", señala un operador de un banco nacional. La estabilidad de la peseta continuó favoreciendo a la Bolsa española, que ayer cerró con un avance del 0,52%.

Mientras que el dólar lograba ayer apreciarse más de un 2% con el marco, continuaba su caída libre con el yen. En Tokio rebasó consecutivamente nuevos mínimos históricos hasta llegar a 80,15 yenes. La contundente intervención del Banco de Japón, según los operadores, permitió a la moneda nipona recuperarse hasta los 83,10 yenes. La fuerte ventaja comercial de Japón sigue siendo el factor de fondo que favorece la apreciación del yen, que ha ganado ya un 20% frente al dólar desde principios de año.

En el Gobierno japonés se han disparado las alarmas. Elministro de Finanzas, Masayoshi Takemura, pidió ayer la revisión del actual sistema internacional de tipos de cambio e insté a EE UU a que interviniera para defender a su moneda, informa Reuter. La débil recuperación nipona se está viendo amenazada por la fortaleza del yen, que resta competitividad a la industria exportadora japonesa. Tokio anuncié que prepara un paquete de medidas monetarias y fiscales para ayudar al yen.

Mientras que se considera probable que el Banco de Japón recorte finalmente sus tipos de interés a corto plazo -ahora en el 1,75%-, los economistas dudan que se tomen las medidas de apertura necesarias para reducir el gigantesco superávit comercial nipón.

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