El alcalde, obligado a utilizar su voto doble por la ausencia de cinco de sus concejales

Un asunto trivial, el reconocimiento de una deuda de 9,5 millones con un provee dor, hizo ayer que el alcalde, José María Álvarez del Manzano, utilizase por primera vez en sus cuatro años al frente de la corporación madrileña su voto de calidad para resolver un empate en las votaciones. Algo nunca visto, puesto que el PP tiene mayoría absoluta (30 concejales de 57) y ni siquiera la indisciplina de los ediles díscolos había hecho perder una votación jamás. Pero ayer la ausencia momentánea de cinco miembros del PP despistados obligó al regidor a utilizar su voto doble.

El portavoz del PSO...

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Un asunto trivial, el reconocimiento de una deuda de 9,5 millones con un provee dor, hizo ayer que el alcalde, José María Álvarez del Manzano, utilizase por primera vez en sus cuatro años al frente de la corporación madrileña su voto de calidad para resolver un empate en las votaciones. Algo nunca visto, puesto que el PP tiene mayoría absoluta (30 concejales de 57) y ni siquiera la indisciplina de los ediles díscolos había hecho perder una votación jamás. Pero ayer la ausencia momentánea de cinco miembros del PP despistados obligó al regidor a utilizar su voto doble.

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El portavoz del PSOE, Juan Barranco, aprovechó para pedir un recuento, de votos al percatarse de que faltaban el edil de Hacienda, Fernando López Amor; Ángel Matanzo, ex edil de Centro, que ya ha anunciado su abandono del PP; Mercedes de la Merced, presidenta de Chamberí; el concejal de Carabanchel, Manuel Martínez Blanco, y el de Barajas y Hortaleza, Jorge Tapia, en el momento de la votación del punto 103 del orden del día.Los funcionarios municipales contaron primero 25 ediles del PP presentes, 20 del PSOE (faltaba uno) y los seis con que cuenta Izquierda Unida. Ni el voto de calidad del alcalde resolvía la situación, puesto que no había empate, así que el PP hubo de reconocer que perdería. la votación. Por dos veces asumieron el error.

Pero los concejales de Salamanca y Chamartín, Ángel Larroca y Miguel Cantos, enarbolaron sus dedos para contar de nuevo. Veinticinco concejales a cada lado de la sala. El secretario del Ayuntamiento, Mario Corella, lo ratificó: la concejal de IU Marisa Castro había abandonado el salón de plenos antes de la votación. Pocos minutos después, el concejal de Limpieza, Luis Molina, agarraba a su compañero Miguel Ángel Araujo (presidente de Villaverde y Usera) de la faldilla de la chaqueta para impedir que saliese de la sala.

Buena reprimenda

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Afuera, un colaborador del equipo de gobierno recordaba la cantidad de veces que el alcalde ha instado a sus concejales que no salgan tanto al patio de Cristales o al cercano despacho de Esperanza Aguirre (tercera teniente de alcalde), donde usualmente toman un tentempié. Al final del pleno, el alcalde comentó que les iba a caer una buena reprimenda a los ausen

La sesión fue inhabitualmente tensa. El tono empezó a elevarse nada más comenzar el pleno, cuando se debatía la moción por la que el PSOE solicitaba la facultad de casar para sus concejales. El alcalde (que sólo ha delegado esa facultad en los ediles que presiden distritos) rechazó la petición porque estaba "mal formulada", pero concedió la posibilidad de que los ediles socialistas celebren matrimonios civiles en casos excepcionales.

El primer teniente de alcalde, Luil María Huete, rechazó la petición y calificó de "fundamentalismo ideológico" los argumentos en los que se apoyó la concejal Ana Tutor (la mayor tolerancia religiosa de la izquierda) para defender su pro posición.

El debate terminó en bronca y advertencias severas cuando el edil socialista Eugenio Morales insinuó que el PP había presionado al secretario del Ayuntamiento para que emitiese un informe a favor de la actuación del equipo de gobierno respecto la supuestas irregularidades en el sorteo de plazas de aparcamiento en la plaza de Oriente.

El alcalde pidió a Morales que retirase sus palabras, que consideraba "una ofensa grave" a los concejales y al secretario, y le advirtió que enviaría a los servicios jurídicos municipales el contenido de su intervención por si encontrasen indicios de delito. Más tarde, Huete comentó que es bastante improbable que el regidor decida querellarse.

Las cuentas municipales. El concejal socialista Alfredo Tejero recriminó al equipo de gobierno que modifique los actuales presupuestos para pagar 7.500 millones de pesetas de deudas de 1994, mientras asegura que el Ayuntamiento tuvo un superávit de 12.000 millones el año pasado. "Ustedes legalizan gastos autorizados ilegalmente, puesto que no había partida presupuestaria para ello", argumentó Tejero.

López Amor explicó que esas deudas se explican por los mayores importes de determinados servicios que prestan compañías privadas (como la recogida de basuras).

Ciudad Universitaria. El concejal de Urbanismo aceptó que en el plan especial para la reforma de la Ciudad Universitaria se prohiba una superficie comercial como quería el PSOE, pero se negó a reducir las plazas de aparcamiento.

Apertura de los jardines del palacio de Anglona. El Partido Popular aceptó una moción del PSOE que solicitaba la apertura al público de los jardines del palacio de Anglona (junto a la plaza de la Paja, en el distrito Centro), que son de propiedad municipal, pero de los cuales sólo disfrutan los residentes en la mansión transformada en pisos de lujo. La edil de Medio Ambiente, Esperanza Aguirre, prometió, estudiar qué horario será el más adecuado para abrir el histórico jardín al público. El palacio de Anglona es uno de los últimos palacios con jardín.

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