Desmantelada una banda que distribuía máquinas de azar trucadas

No había manera de ganar en esas máquinas los premios mayores, aquellos que sobrepasaban las 5.000 pesetas. Ayer fue desarticulada una banda que, bajo el nombre comercial de Tomboeur, SL, se dedicaba a sembrar por negocios de hosteleria maquinas expendedoras de boletos que jamás daban los premios anunciados (de 5.000 y 10.000 pesetas los mayores), según informó la Dirección General de Protección Ciudadana.En la operación, efectuada por el servicio de control de juegos de azar de la Comisaría General de la Policía, fueron detenidas tres personas. Tenían dos almacenes: en la calle del Halcón, 13...

No había manera de ganar en esas máquinas los premios mayores, aquellos que sobrepasaban las 5.000 pesetas. Ayer fue desarticulada una banda que, bajo el nombre comercial de Tomboeur, SL, se dedicaba a sembrar por negocios de hosteleria maquinas expendedoras de boletos que jamás daban los premios anunciados (de 5.000 y 10.000 pesetas los mayores), según informó la Dirección General de Protección Ciudadana.En la operación, efectuada por el servicio de control de juegos de azar de la Comisaría General de la Policía, fueron detenidas tres personas. Tenían dos almacenes: en la calle del Halcón, 13, de Madrid, y en la del Geranio, de Leganés. La investigación policial se inició en octubre y duró cinco meses. En este tiempo, los agentes efectuaron numerosas vigilancias y seguimientos de los instaladores de las máquinas hasta que comprobaron el fraude.

El juego consistía en lo siguiente: las máquinas contenían 1.000 bolas con tres boletos cada una. Al precio de 100 pesetas por unidad, significa que cada carga reportaba 100.000 pesetas, que generaba unos beneficios de 60.000 pesetas tras descontar costes y los teóricos premios, que podían estar o no. Las bolas con premio van separadas y se introducían al arbitrio del dueño del local.

La policía comprobó, en efecto, que las bolas con los premios mayores de 5.000 y 10.000 pesetas no existían, pese a ser utilizados como reclamo. La empresa utilizaba a terceros que simulaban obtener estos premios.

Los tres detenidos están acusados principalmente de delitos contra la Hacienda Pública y estafa. En la operación policial se intervinieron más de un millón de boletos, con un valor que sobrepasa los 33 millones de pesetas; más de 100.000 bolas de plástico, valoradas en medio millón de pesetas, y 192 máquinas, que alcanzan un valor de 3.800.000 pesetas. Una vez que prestaron declaración en las dependencias policiales fueron puestos en libertad, aunque con la obligación de comparecer ante el juez.