Talentos

En EL PAÍS del pasado día 26 de junio leí un artículo firmado por Nacho Sáenz de Tejada con el título La industria del disco busca talento en la calle. Las declaraciones vertidas por los directores de las compañías discográficas son insultantes para cualquier músico creador en este país.Dice Ele Juárez: "Si no se actúa rápido, seremos absorbidos por lo anglosajón". Ya lo estamos gracias a los esfuerzos que en ese sentido hacen esas cinco multinacionales que manejan el 80% del mercado. Y, como su nombre delata, obedecen los dictados, de sus empresas matrices en el extranjero.

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En EL PAÍS del pasado día 26 de junio leí un artículo firmado por Nacho Sáenz de Tejada con el título La industria del disco busca talento en la calle. Las declaraciones vertidas por los directores de las compañías discográficas son insultantes para cualquier músico creador en este país.Dice Ele Juárez: "Si no se actúa rápido, seremos absorbidos por lo anglosajón". Ya lo estamos gracias a los esfuerzos que en ese sentido hacen esas cinco multinacionales que manejan el 80% del mercado. Y, como su nombre delata, obedecen los dictados, de sus empresas matrices en el extranjero.

¿Quiénes se inventaron los artistas que no cantan que no tocan y que, en definitiva, no crean; que sólo tienen una imagen vendible por televisión? Sencillamente, las empresas que manejan los medios de comunicación musicales. Las multinacionales.

Para esos productos de "toma el dinero y corre" (como dice Ele Juárez) pide el señor Cámara las ventajas fiscales que la Administración otorga a la cultura.

Hay todavía mucho público ingenuo que cree que las listas de radiofórmula son listas de ventas, o listas elaboradas por críticos musicales competentes. Estas listas se confeccionan con dinero, desde los despachos más altos de las discográficas.

Ustedes están intentando vender música-basura a los españoles, para ello compran todos los canales de promoción y asfixian los proyectos independientes. El público no quiere su basura sabiendo que hay talentos por descubrir. De ahí viene la crisis de ventas, señores, de su ineptitud.

Ojalá fuera cierto que van a dejar sus sillones y van a salir a la calle a buscar talentos.