Zedillo retoma la antorcha electoral del PRI mexicano donde mataron a Colosio

El nuevo candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia mexicana, Ernesto Zedillo Ponce de León, realizó el jueves una visita a Tijuana para rendirle homenaje a su antecesor, Luis Donaldo Colosio, en el mismo lugar en que cayó asesinado. En un viaje relámpago, Zedillo, su esposa y tres de sus hijos viajaron primero a Magdalena de Kino, donde visitaron la tumba de Colosio, y luego a Tijuana y Mexicali, ciudad esta última con la que mantiene estrechos vínculos familiares. Fue el primer desplazamiento de su campaña electoral.

Rodeado de impresionantes medidas...

El nuevo candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia mexicana, Ernesto Zedillo Ponce de León, realizó el jueves una visita a Tijuana para rendirle homenaje a su antecesor, Luis Donaldo Colosio, en el mismo lugar en que cayó asesinado. En un viaje relámpago, Zedillo, su esposa y tres de sus hijos viajaron primero a Magdalena de Kino, donde visitaron la tumba de Colosio, y luego a Tijuana y Mexicali, ciudad esta última con la que mantiene estrechos vínculos familiares. Fue el primer desplazamiento de su campaña electoral.

Rodeado de impresionantes medidas de seguridad, lo que a primera vista parecía exagerado, Zedillo aprovechó su presencia en Lomas Taurinas, el lugar donde Colosio pronunció su último mitin, para dedicarle unos minutos de silencio y ofrendarle unas flores a su amigo, del que era también coordinador de campaña. Desde ahí viajó a Mexicali, donde hizo su primer importante pronunciamiento político: "Voy a terminar con el centralismo que sufre México". Zedillo llegó a mediodía a Magdalena de Kino (Estado de Sonora), el pueblo natal de Colosio. Primero visitó a los padres del malogrado político y luego se trasladó al cementerio local para visitar la tumba de aquél, que se ha convertido en un lugar de peregrinación de todo México, como lo demuestran las más de 12.000 firmas que han sido allí estampadas por gentes de toda condición social.

"Luis Donaldo Colosio fue en todo momento el mejor hombre para conducir a México y ahora frente a su tumba, sus padres y hermanos, afirmo mi determinación de honrar su legado", dijo Zedillo, visiblemente emocionado. Tras comentar que el ejemplo de Colosio "nutrirá siempre" su espíritu y sus fuerzas, Zedillo hizo una severa advertencia: "No nos confirmaremos con saber quién dio el balazo, sino exigiremos saber quién lo pensó, quién lo planeó, quién está detrás del crimen y quien es el autor intelectual".

La familia Zedillo viajó después a Tijuana. Allí, en el mismo lugar donde el candidato del PRI cayó abatido por las balas de Mario Aburto, se ha levantado un monumento funerario en su honor, que al igual que su tumba en Magdalena de Kino es visitado diariamente por centenares de personas de todo el país. "Vine aquí.", dijo Zedillo rodeado de su mujer y tres de sus hijos, "a recoger la estafeta de Colosio para tener la fuerza para luchar".

La parte más política de esta primera visita que realiza fuera de la capital mexicana correspondió a Mexicali, capital del Estado de Baja California, y a donde él emigró con sus padres cuando sólo tenía tres años. Zedillo dio un mitin ante 6.000 personas en el auditorio estatal en el que arremetió contra el centralismo. En opinión del candidato, el centralismo "coarta la iniciativa y frustra el trabajo de las mujeres y hombres" de las regiones de la nación. También se comprometió a hacer de México "un país más fuerte, con una economía estable y un crecimiento con mejores salarios, mejor educación, y con los servicios suficientes para cada mexicano". "Me comprometo con los que menos tienen para mejorar los ingresos de cada familia mexicana", indicó.

Mientras tanto, en la capital, el presidente Carlos Salinas de Gortari convocaba a los gobernadores y a los miembros de su Gabinete en una reunión de urgencia para evaluar la situación del país. Pese a que no hubo información oficial, un gobernador dijo a la salida: "El país no se va a deshacer".