Un joven muere al caer al vacío mientras jugaba al balón en la azotea de un edificio de "okupas"

Esta vez el juego acabó en tragedia. Uno de los chicos que jugaba ayer "un partidillo" de rugby en la azotea de la antigua escuela de formación profesional de la fábrica de Boetticher y Navarro, ocupada por las tribus urbanas del barrio, cayó al vacío desde la azotea y murió en el acto. Eran las cinco de la madrugada del sábado cuando José Manuel García Almodovar, de 23 años, alias El Gallofa, perdió la vida. En el edificio donde ocurrió el percance conviven heayys, rollers, punkis y miembros de otras tribus urbanas que se reparten las plantas como una familia bien avenida.

La antigua e...

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Esta vez el juego acabó en tragedia. Uno de los chicos que jugaba ayer "un partidillo" de rugby en la azotea de la antigua escuela de formación profesional de la fábrica de Boetticher y Navarro, ocupada por las tribus urbanas del barrio, cayó al vacío desde la azotea y murió en el acto. Eran las cinco de la madrugada del sábado cuando José Manuel García Almodovar, de 23 años, alias El Gallofa, perdió la vida. En el edificio donde ocurrió el percance conviven heayys, rollers, punkis y miembros de otras tribus urbanas que se reparten las plantas como una familia bien avenida.

La antigua escuela de la fábrica Boetticher y Navarro, en el número 8 de la Avenida de Andalucía, (Villaverde) es un edificio que desde hace años ocupan los colegas del barrio. Alli se reunen durante el día y la noche pandas de jóvenes de diferente ideología. Entre sus ruinosas paredes pasan largas veladas charlando, tomando birras y haciendo lo que pueden. En un sábado soleado es habitual ver en la fachada de la vieja factoría a numerosos jóvenes. Nadie, sin embargo, se asomaba ayer por allí. El motivo: horas antes había fallecido uno de los numerosos chicos que integran la familia en ese lugar sagrado para todos ellos, -le llaman gaztetxe, en eusquera, casa de la juventud-.Bajo los focos

Cuando ocurrió el accidente mortal cerca de 50 amigos estaban repartidos en las dos plantas del edificio. Un grupo, para no molestar, decidió subir a la inmensa azotea y jugar un informal partido de rugby. Aunque era de noche, los potentes focos de la carretera de Andalucía iluminan el amplio tejado, que tiene una superficie similar a dos campos de baloncesto.

En un lance del juego, alguien envío una pelota muy elevada a José Manuel García Almodóvar, de 23 años. Los amigos relataron a los agentes que en ese momento se encontraba a unos cuatro metros del vacío. Comenzó a caminar hacia atrás de espaldas. No calculó bien sus pasos y chocó contra la pequeña barandilla, de un metro de altura. Con la inercia su cuerpo se fue hacia atrás y se desplomó al suelo. Un amigo intento agarrarle, pero no pudo evitar la caída. Según la policía, el joven falleció en el acto a causa de un fuerte politraumatismo. Los agentes confiscaron como única prueba el balón de rugby.

Los amigos de José Manuel García Almodovar no tenían ayer ni ganas ni fuerzas para hablar. "Ha sido un accidente, cuando jugábamos al rugby, y no hay nada más que decir", musitó un joven. Otro joven aseguro: "era uno más de la familia, aunque su hermano solía venir mucho más que él".

El joven fallecido trabajaba en un empresa del barrio como escayolista. Un tío de Jose Manuel García, indicó que éste siempre dormía en su casa con sus padres y que "esporádicamente visitaba la casa de okupas".

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Anoche en Gaztetxe los okupas preparaban una queimada en memoria del fallecido.

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