Fraga pide a los populares que no se confíen y exhorta a todos los gallegos a que acudan a votar

Los resultados de las encuestas publicadas ayer, entre ellas la difundida por EL PAÍS, mostraron tan buenas perspectivas electorales para el Partido Popular en Galicia que permitieron a José María Aznar exclamar por la mañana que difícilmente podía haberse levantado con mejor pie. Manuel Fraga, con la misma cautela que ha mostrado desde el inicio de la campaña para no dar por conseguida de antemano la victoria, pidió a quienes desean que él continúe al frente de la Xunta que no se confíen y acudan a votar el día 17.

El candidato socialista, Antolín Sánchez Presedo, se esforzó en encajar...

Los resultados de las encuestas publicadas ayer, entre ellas la difundida por EL PAÍS, mostraron tan buenas perspectivas electorales para el Partido Popular en Galicia que permitieron a José María Aznar exclamar por la mañana que difícilmente podía haberse levantado con mejor pie. Manuel Fraga, con la misma cautela que ha mostrado desde el inicio de la campaña para no dar por conseguida de antemano la victoria, pidió a quienes desean que él continúe al frente de la Xunta que no se confíen y acudan a votar el día 17.

El candidato socialista, Antolín Sánchez Presedo, se esforzó en encajar con buena cara los malos augurios para su partido y aseguró que le servirán de estímulo para trabajar más intensamente en lo que queda de campaña electoral.Cuando Fraga era candidato a la presidencia del Gobierno de la nación y las encuestas siempre le vaticinaban una derrota, apelaba permanentemente a que el resultado de las votaciones era el único fiable. Ayer, cuando los sondeos anunciaban que acrecentará su mayoría absoluta, señaló que hay "una base objetiva" para pronosticar su victoria, pero evitó un triunfalismo que podría perjudicarle si desmoviliza a su electorado.

Y no sólo a su electorado. Cuando mayor sea la abstención, más perjudicará al partido hegemónico, en este caso el PP, por lo que al presidente de la Xunta le interesa conseguir que los gallegos acudan masivamente a las urnas. "Vuelvo a pedir a todo el mundo que esté allí, a los que nos votan a nosotros y también a los que votan a los demás. Y después, a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga", sentenció en A Estrada (Pontevedra), informa Javier Rivas.

Mientras Fraga continuaba, respaldado por Aznar, su incesante recorrido por pueblos y aldeas, Sánchez Presedo acudió con una hora de retraso a una conferencia de prensa en la sede de su partido en Santiago.

Flanqueado por Carmen García Bloise, de la ejecutiva del PSOE, el candidato socialista rehuyó extraer consecuencias de la unánime coincidencia de los sondeos y se acogió a que un 40% de los consultados por Demoscopia para EL PAÍS se declararon indecisos. También se acogió a que la comparación entre las encuestas de hace dos semanas y las más recientes muestran una evolución favorable al PSOE. No obstante, Sánchez Presedo se comprometió a redoblar el esfuerzo en lo que queda de campaña. "Como soy joven, puedo seguir pedaleando y remontar las rampas", bromeó.

"Menos de lo mismo"

Al anochecer, ante un auditorio de unas 700 personas reunidas en el polideportivo de Camariñas, el candidato socialista parafraseó a Aznar, cuando decía en la campaña de las legislativas que González ofrecía "más de lo mismo", para asegurar que Manuel Fraga "ofrece menos de lo mismo" para Galicia. "Los gallegos", dijo asumiendo la representación del electorado socialista, "no queremos un Gobierno que sea una comisión de festejos, ni tampoco que mande sino que gobierne".

El candidato socialista contará pasado mañana con el apoyo de Felipe González, que intervendrá en un mitin en La Coruña. En esta provincia, la primera en que el PSOE derrotó al PP en Galicia y cuya capital gobierna con mayoría absoluta el alcalde socialista Francisco Vázquez, los sondeos vaticinan un descalabro de la candidatura de Sánchez Presedo.

Vázquez se ha distanciado ostensiblemente de Sánchez Presedo, al que ha reprochado la exclusión de personas de su confianza en las candidaturas electorales, entre ellos el ex presidente de la Xunta Fernando González Laxe, predecesor de Fraga. El alcalde de La Coruña, alineado en el sector guerrista, ha sugerido reiteradamente que pedirá cuentas de los resultados a los responsables de la campaña socialista, todos ellos renovadores.

Pero esta actitud, en un momento decisivo de la confrontación electoral, ha merecido el reproche de destacados dirigentes nacionales del PSOE, entre ellos Carlos Solchaga. Ayer mismo, Carmen García Bloise comentó que le parece sorprendente que el veterano alcalde coruñés incurra en "errores propios de quienes acaban de llegar a la política". La dirigente socialista señaló que, a diferencia de Vázquez, ella no va a cometer la "torpeza" de asegurar que es inimaginable el futuro del PSOE sin la continuación del tándem González-Guerra.

Vázquez intervendrá, junto a González y Sánchez Presedo, en el mitin de pasado mañana. En su única intervención pública hasta ahora en la campaña, pocas horas antes del debate televisado entre Fraga y Presedo, expresó sus discrepancias con la forma en que el PSOE gallego ha afrontado estos comicios y evitó pedir expresamente el voto para el candidato socialista a la presidencia de la Xunta.

Los dirigentes del Bloque Nacionalista Galego vieron ayer confirmada su expectativa de poder duplicar la representación que hasta ahora tenía en el Parlamento autonómico, cinco diputados, y de reforzar su imagen como la oposición más beligerante.

Nueva mayoría

Sin embargo, el candidato del BNG a la presidencia de la Xunta, Xosé Manuel Beiras, parecía ayer más preocupado por el pronóstico de una nueva mayoría del PP que satisfecho por el previsible ascenso de su formación. "Le están dando a Fraga una especie de balón de oxígeno para que se crea que aún puede conseguir la mayoría absoluta", declaró en Cangas do Morrazo (Pontevedra).

Beiras destacó que los sondeos confirman la tendencia "enormemente vertical" del BNG a costa del descenso del PSOE, pero a continuación ironizó sobre los vaticinios. "En las anteriores elecciones autonómicas de 1989, durante la campaña, las encuestas nos anunciaban que conseguiríamos tres diputados, y al final fueron cinco. Si ahora ocurre lo mismo, acabaremos con 20 escaños", manifestó el dirigente nacionalista.

La unanimidad de todos los sondeos en otorgar a Fraga una holgada mayoría absoluta no hizo variar su discurso a Beiras, quien volvió a insistir que su formación política aspira a convertirse en el "eje de una alternativa" al Gobierno del PP, en alusión a un posible acuerdo poselectoral con el PSOE.