Detenido un agente en Cádiz por facilitar la fuga de un preso a cambio de 11 millones
La policía detuvo ayer al agente de la escala básica del Cuerpo Nacional de Policía Juan V. M., acusado de facilitar la fuga de un preso muy peligroso del hospital clínico de Puerto Real (Cádiz) a cambio de 11 millones de pesetas, según la versión oficial facilitada por la comisaría provincial. El agente podría haber aceptado tres millones de pesetas al realizarse la fuga y otros ocho en una posterior compensación por la presunta ayuda prestada.El preso fugado y más tarde detenido en Illescas (Toledo) es Jesús Jiménez Silva, de 36, años, con 22 detenciones previas y que cumplía una condena de ...
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La policía detuvo ayer al agente de la escala básica del Cuerpo Nacional de Policía Juan V. M., acusado de facilitar la fuga de un preso muy peligroso del hospital clínico de Puerto Real (Cádiz) a cambio de 11 millones de pesetas, según la versión oficial facilitada por la comisaría provincial. El agente podría haber aceptado tres millones de pesetas al realizarse la fuga y otros ocho en una posterior compensación por la presunta ayuda prestada.El preso fugado y más tarde detenido en Illescas (Toledo) es Jesús Jiménez Silva, de 36, años, con 22 detenciones previas y que cumplía una condena de 40 años en la prisión Puerto I de El Puerto de Santa María (Cádiz) por tres violaciones, un homicidio y un intento de asesinato.
La detención se produjo después de que la esposa del detenido y su hija afirmaran que un policía ayudó a Jiménez Silva a escapar, declaración refrendada por el preso ante la juez toledana. Estas declaraciones motivaron una investigación interna de la Dirección General de Policía y otra penal del juzgado de Puerto Real.
La fuga se produjo el pasado 5 de septiembre del hospital puertorrealeño cuando el preso esperaba ser operado de vesícula. Según declaró el policía ahora detenido, la mujer del recluso ayudó a quitarle las esposas mientras él atendía una llamada telefónica que luego resultó falsa.
Para ello, el agente se ausentó de la habitación desplazándose a unas dependencias próximas. Sin embargo, fuentes policiales aseguraron que el agente no tenía motivo para haber actuado de tal forma, ya que podía haber atendido la llamada desde la misma habitación en donde se encontraba el preso.