El Bundesbank insta al Gobierno a reducir la deuda pública y no subir los impuestos

El Bundesbank, banco central alemán, arremetió ayer, en su último informe de junio, contra la política económica del Gobierno de Kohl. El Buba, preocupado por la presión inflacionista y por la recesión que sufre Alemania, pide un mayor rigor presupuestario para reducir la deuda pública y se muestra contrario al aumento de las cargas fiscales."Otro aumento de las contribuciones empeoraría las perspectivas de crecimiento económico", señala el banco central en su informe, en el que desaconseja la imposición de nuevas cargas a las empresas que desincentivarían las nuevas inversiones. La aut...

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El Bundesbank, banco central alemán, arremetió ayer, en su último informe de junio, contra la política económica del Gobierno de Kohl. El Buba, preocupado por la presión inflacionista y por la recesión que sufre Alemania, pide un mayor rigor presupuestario para reducir la deuda pública y se muestra contrario al aumento de las cargas fiscales."Otro aumento de las contribuciones empeoraría las perspectivas de crecimiento económico", señala el banco central en su informe, en el que desaconseja la imposición de nuevas cargas a las empresas que desincentivarían las nuevas inversiones. La autoridad monetaria alemana insta al Gobierno a que reduzca el gasto público, ya que el Estado, dice, absorbe en la actualidad el 90% del ahorro nacional.

El Bundesbank advierte que si no se modera esta tendencia, el déficit público a finales de 1993 representará el 7,5% del producto interior bruto (PIB).

Ayer, precisamente, el gobierno alemán anunció el nombramiento de Hans Tietmeyer como presidente del Bundesbank a partir del 1 de octubre y hasta septiembre de 1999. El nuevo responsable de la política monetaria de Alemania ocupa en la actualidad el cargo de vicepresidente de la entidad y está considerado un hombre de confianza del canciller Helmut Kohl. Sustituirá en el cargo a Helmut Schlesinger, que ha defendido con dureza la independencia del banco central frente al Gobierno, siendo objeto de duras críticas por parte de los políticos, por considerar que el exceso de rigor monetario ha recrudecido la recesión en Europa.

El nuevo presidente del Bundesbank, de 61 años, lleva cuatro años en el banco y actuó durante los ochenta de sherpa (ayudante) de Kohl en las reuniones del Grupo de los Siete. El Gobierno designó vicepresidente a Johann Wilhelm Gaddum, que como Tietmeyer pertenece al Partido Democristiano de Helmut Kohl.

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