Aznar considera la entrada del juez una operación para ocultar Filesa

José María Aznar tenía previsto ayer presentar en Cádiz las líneas maestras del programa del Partido Popular contra el tráfico y el consumo de drogas. Al día siguiente del fichaje del juez Baltasar Garzón como candidato número dos del PSOE por Madrid, el nombre del escenario elegido, un gran restaurante sobre el mar denominado El Baluarte de los Mártires, parecía un presagio. Sin embargo, Aznar superó la evidente incomodidad en que le ha situado el salto del juez a la arena en su propia circunscripción electoral y decidió agarrar el toro por los cuernos. Acusó a Felipe González, sin nom...

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José María Aznar tenía previsto ayer presentar en Cádiz las líneas maestras del programa del Partido Popular contra el tráfico y el consumo de drogas. Al día siguiente del fichaje del juez Baltasar Garzón como candidato número dos del PSOE por Madrid, el nombre del escenario elegido, un gran restaurante sobre el mar denominado El Baluarte de los Mártires, parecía un presagio. Sin embargo, Aznar superó la evidente incomodidad en que le ha situado el salto del juez a la arena en su propia circunscripción electoral y decidió agarrar el toro por los cuernos. Acusó a Felipe González, sin nombrarle, de prestidigitación política y de promover una operación de imagen buscando que se hable de Garzón y no de Filesa, o de los 12.000 muertos por consumo de drogas en menos de 10 años. El candidato del PP negó de forma tajante que su formación esté negociando con Juan Hormaechea para incluirle en las listas y reiteró que apuesta por la estabilidad de la peseta y "un tipo de cambio realista".Aznar considera el fichaje de Garzón, según dijo, "una más de las operaciones de prestidigitación a que nos tiene acostumbrados quien promueve esta candidatura". "Pero España", agregó, no está para operaciones de imagen o golpes de efecto, sino que quiere soluciones. Eso es lo importante, lo demás no nos interesa nada".

Hormaechea

Aznar negó que dirigentes o representantes de su partido estén negociando con el presidente del Comunidad autónoma de Cantabria, Juan Hormaechea, su repesca en la candidatura al Senado. "Las listas están cerradas en toda España", subrayó, "y eso incluye Cantabria. Si alguien quiere ir al margen, está en su derecho, pero debe saber que eso produce consecuencias". Aunque Hormaechea figura oficialmente acreditado ante la Junta Electoral Central como representante de su antigua formación política, la Unión para el Progreso de Cantabria (Upca), motivo suficiente para su expulsión, según los estatutos del PP, el candidato a La Moncloa eludió manifestarse al respecto: "No me corresponde a mí establecerlo, sino a los órganos correspondientes".

El presidente del PP participó en Cádiz a las cuatro de la tarde en una comida protocolaria con medio millar de afiliados. Por la noche, tenía previsto visitar la Feria de Sevilla. A media tarde, presentó ante afiliados y familias afectadas por casos de drogadicción, las principales propuestas del programa electoral frente a este problema. A grandes rasgos, consisten en sancionar el consumo en público, potenciar programas de prevención y rehabilitación gratuitos, coordinar en un solo organismo todos los cuerpos policiales encargados de la represión del tráfico, sancionar y clausurar los locales públicos tolerantes con el uso de drogas, y garantizar el cumplimiento íntegro de las condenas impuestas a los narcotraficantes.

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