Tribuna:

Estancamiento derivado

Los productos derivados de los mercados de renta variable han impuesto sus criterios en la jornada de vencimiento, tanto por la indefinición de la Bolsa como por la cuantía de los ajustes. El Ibex 35 se mantuvo hasta la conclusión del cierre mensual entre el 2.600 y el 2.650, niveles en los que se concentraban la mayoría de las posiciones abiertas para el vencimiento de abril.La ponderación en la Bolsa de los valores del Ibex es tan importante que hubo que plegarse a la voluntad del producto derivado. La contratación fue mucho menor que en sesiones anteriores - 14.500 millones de pesetas- y es...

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Los productos derivados de los mercados de renta variable han impuesto sus criterios en la jornada de vencimiento, tanto por la indefinición de la Bolsa como por la cuantía de los ajustes. El Ibex 35 se mantuvo hasta la conclusión del cierre mensual entre el 2.600 y el 2.650, niveles en los que se concentraban la mayoría de las posiciones abiertas para el vencimiento de abril.La ponderación en la Bolsa de los valores del Ibex es tan importante que hubo que plegarse a la voluntad del producto derivado. La contratación fue mucho menor que en sesiones anteriores - 14.500 millones de pesetas- y estuvo más repartido, aunque los grandes valores concentraban la mayor parte del negocio.

La situación técnica apenas ha variado, ya que el índice general se mantiene cerca del 240%, un punto que le cuesta trabajo superar y del que le resulta muy difícil despegarse. La toma en consideración de los factores políticos, una vez demostrado que de los económicos no puede esperarse gran cosa, empezará a influir a partir del lunes, cuando no haya compromisos inmediatos a los que hacer frente.

El índice general gana al cierre un 0,31%, 75 centésimas, mientras que el Ibex 35 se conformó con un 0,27%, al cesar las intervenciones del periodo de cómputo del cierre mensual.

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