De derechas y anticomunistas

El 27 de noviembre de 1992 será una fecha que difícilmente olvidarán los alumnos del Instituto de Torrelodones (Madrid). Ese día fueron detenidos dos estudiantes en las inmediaciones del centro por su presunta implicación en la muerte de la dominicana Lucrecia Pérez. El autor de los hechos fue el guardia civil Luis Merino Pérez, de 25 años, nueve años mayor que los tres menores que le acompañaban en los hechos. En el centro en el que estudian dos de estos menores -Felipe C. M. B. , Víctor F. G. M., ambos de 16 años-, algunos alumnos dicen que están siendo amenazados por grupos...

El 27 de noviembre de 1992 será una fecha que difícilmente olvidarán los alumnos del Instituto de Torrelodones (Madrid). Ese día fueron detenidos dos estudiantes en las inmediaciones del centro por su presunta implicación en la muerte de la dominicana Lucrecia Pérez. El autor de los hechos fue el guardia civil Luis Merino Pérez, de 25 años, nueve años mayor que los tres menores que le acompañaban en los hechos. En el centro en el que estudian dos de estos menores -Felipe C. M. B. , Víctor F. G. M., ambos de 16 años-, algunos alumnos dicen que están siendo amenazados por grupos ultras y skins.

Doce de los alumnos, compañeros de clase de Felipe y de Víctor y afines a su ideología, no olvidarán jamás ese viernes, ni esa hora, 10.45. Todos vieron cómo la policía traía apresado al primero de sus amigos y cómo capturaba a su compañero en las puertas del instituto. En la calle el grupo había compartido durante mucho tiempo "juegos de guerra", "aventuras" "desfiles militares" y quizá sueños.

Sus colegas, que se reconocen de derechas y "anticomunistas" se sorprendieron al comprobar por la Prensa que el motivo de los arrestos había sido la presunta implicación en el asesinato de Lucrecia, ocurrido pasado 13 de noviembre en la discoteca Four Rouses, en Aravaca (Madrid).

"Cuando conocimos los motivos no nos los podíamos creer", comentan. Piensan que Felipe y Víctor "quizá fueran engañados" y aseguran que éstos no eran ni skins, ni violentos, ni racistas". "Eran de derechas y anticomunistas como nosotros".

-Sin embargo, otros chicos del centro, de ideología progresista, opinan que los dos detenidos y sus defensores son "ultras" y que; éstos "han estado jugando con fuego y se han quemado". Son "fachas" y entre ellos hay skins. "Son peligrosos, son violentos y nos tienen atemorizados", se quejan mientras sostienen que "el grupo está muy protegido".

Ahora, sin Felipe, el grupo parece estar liderado por L. G. 0. , un muchacho de 17 años, de apariencia normal, y por otro muchacho,que prefiere que le llamen X. Este viste de cuero negro y se cubre la cabeza con una gorra del mismo color.

Ambos sostienen que "Víctor y Felipe son unos tíos de putamadre" y piensan que "les han liado".

Después de los disparos en Four Rouses, los agresores "no fueron capaces de asimilar lo que habían visto" aseguran sus amigos. Ambos se mostraban preocupados. "Víctor hubiera sido capaz de haberlo impedido si hubiese podido", aseguran. Seguramente los dos amigos no recuerden jamás la fecha de su detención, pero sí el día en que murió 11 una negra dominicana llamada Lucrecia".20-NPor otra parte, los datos y las versiones sobre este asunto son totalmente contradictorios. Y más cuando se intenta esclarecer qué ocurrió en la calle del instituto el último 20 de noviembre (20N, aniversario de la muerte de Franco). El grupo de alumnos progresistas dice que la calle "estaba llena de fachas con banderas y símbolós nazis" y que éstos "iban armando bulla". En cambio, los ultras y una profesora del centro lo desmienten y la concejal de Educación, Isabel Ramos, del PP, dice que no sabe nada del asunto.