Agentes de España, Francia e Italia decomisan 3.500 kilos de hachís

El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) ha decomisado 3.500 kilos de hachís en un yate de bandera alemana frente a las costas de Murcia. El barco regresaba a España tras haber cargado la droga en Marruecos. La captura del alijo se produjo durante la Operación Nápoles, unas maniobras internacionales "secretas" que se han desarrollado entre el Estrecho y las Baleares y en las que han participado patrulleras y aviones de España, Francia e Italia.

El SVA, en colaboración con la Guardia Civil de Cartagena (Murcia), interceptó a última hora del domingo al barco de bandera alemana Empr...

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El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) ha decomisado 3.500 kilos de hachís en un yate de bandera alemana frente a las costas de Murcia. El barco regresaba a España tras haber cargado la droga en Marruecos. La captura del alijo se produjo durante la Operación Nápoles, unas maniobras internacionales "secretas" que se han desarrollado entre el Estrecho y las Baleares y en las que han participado patrulleras y aviones de España, Francia e Italia.

El SVA, en colaboración con la Guardia Civil de Cartagena (Murcia), interceptó a última hora del domingo al barco de bandera alemana Empress II, matriculado en Hamburgo, que navegaba frente al cabo de Palos con 3.500 kilos de hachís.La embarcación, con tres tripulantes a bordo, había despertado sospechas en los servicios de aduanas de varios países por sus frecuentes viajes al norte de África, según Ángel Mata, jefe del SVA de Murcia. El domingo, el barco sospechoso fue avistado cuándo navegaba rumbo al mar de Alborán y se aprovechó para interceptarlo. Los inspectores del Servicio de Vigilancia Aduanera descubrieron en su interior 144 fardos de resina de hachís.

Fuentes del SVA explicaron ayer que la captura de este alijo se produjo durante la Operación Nápoles, unas maniobras conjuntas en las que intervinieron una patrullera y un avión italianos, dos barcos y un avión franceses y cinco patrulleras y un avión español. El objetivo de la operación era barrer una amplia zona de mar comprendida entre el estrecho de Gibraltar y las islas Baleares. Una de estos barcos franceses, completamente artillado, sorprendió a los bañistas de la cala Benirrás, de Ibiza, en la que atracó para que un grupo de submarinistas franceses revisara sus fondos.

El despliegue internacional, que se realizó bajo el sello de "secreto", finalizó el domingo. En él intervinieron efectivos de la Guarda de Finanzas italiana, Douannes Francaises y Servicio de Vigilancia Aduanera español.

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