Cartas al director

¡Descabalgar!

Ayer se me ha muerto un amigo. Como todas las muertes, ésta ha sido cruel, dura, dolorosa; pero lo es aún más cuando sabes que van a ser muchos los amigos que van a ir cayendo en ese continuo goteo que supone el consumo de ese caballo asesino.En su entierro, su padre ha proclamado a los cuatro vientos su dolor ,y angustia, incitándonos a los allí presentes a luchar con todas nuestras fuerzas contra una sociedad que está permitiendo que nuestros jóvenes vayan muriendo colgados de un absurdo placer.

Yo quisiera deciros a todos vosotros, amigas/os que, jinetes a lomos de ese horribl...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Ayer se me ha muerto un amigo. Como todas las muertes, ésta ha sido cruel, dura, dolorosa; pero lo es aún más cuando sabes que van a ser muchos los amigos que van a ir cayendo en ese continuo goteo que supone el consumo de ese caballo asesino.En su entierro, su padre ha proclamado a los cuatro vientos su dolor ,y angustia, incitándonos a los allí presentes a luchar con todas nuestras fuerzas contra una sociedad que está permitiendo que nuestros jóvenes vayan muriendo colgados de un absurdo placer.

Yo quisiera deciros a todos vosotros, amigas/os que, jinetes a lomos de ese horrible caballo, vais inexorablemente en busca de la muerte, que aún estáis a tiempo, descabalgar, venir con nosotros. No os muráis,por favor-

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En