Dos choques de camiones con líquido peligroso llevan al caos las carreteras castellonenses
Dos accidentes protagonizados por camiones que transportaban mercancías peligrosas colapsaron ayer el tráfico en la autopista A-7 a su paso por Vinaròs, y en la carretera Nacional 340, que discurre paralela a la autopista, a la altura de Alcalá de Xivert (Castellón). El primer camión transportaba acetato de etilo, sustancia inflamable, y volcó a la una de la tarde. El conductor sufrió heridas leves. La autopista estuvo cortada entre los peajes de Vinaròs y Peñíscola más de ocho horas. Un segundo camión cisterna, cargado de gasóleo, sufrió un choque con otros dos camiones a las siete de la tard...
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Dos accidentes protagonizados por camiones que transportaban mercancías peligrosas colapsaron ayer el tráfico en la autopista A-7 a su paso por Vinaròs, y en la carretera Nacional 340, que discurre paralela a la autopista, a la altura de Alcalá de Xivert (Castellón). El primer camión transportaba acetato de etilo, sustancia inflamable, y volcó a la una de la tarde. El conductor sufrió heridas leves. La autopista estuvo cortada entre los peajes de Vinaròs y Peñíscola más de ocho horas. Un segundo camión cisterna, cargado de gasóleo, sufrió un choque con otros dos camiones a las siete de la tarde en la N-340, lo que acabó de crear el caos. El atasco afectó al traslado de al menos dos de las víctimas del accidente del miércoles en Torreblanca.El primer camión cisterna transportaba unos 110.000 litros de acetato de etilo, sustancia inflamable por encima de los 21 grados y de la que se derramó una pequeña cantidad tras el vuelco.
La Guardia Civil de Castellón cortó el tramo comprendido entré los peajes de Vinaròs y Peñíscola en ambos sentidos, a la espera de que la sustancia química se trasvasara a otra cuba. Grupos de bomberos refrigeraron con espuma el escape para evitar una posible explosión. Las retenciones provocadas por el accidente alcanzaron a última hora de ayer más de 40 kilómetros. Entre los vehículos atrapados en el enorme atasco se hallaba el coche fúnebre que transportaba a Santa Coloma de Gramanet (Barcelona) los ataúdes de dos de las víctimas del accidente de Torreblanca. Torreblanca se encuentra a menos de 40 kilómetros de Vinaròs.
El camión volcado, matrícula V-0285-DJ, pertenecía a la empresa valenciana de transportes Orts-Simó, según informó ayer el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat. La Jefatura de Tráfico desvió la circulación por la autopista hacia la carretera Nacional 340, donde seis horas más tarde se produjo un segundo accidente que obligó también a interrumpir el tráfico en uno de sus tramos.
En el segundo suceso tres camiones, uno de ellos cargado con gasolina y gasóleo, colisionaron en el kilómetro 1.016 de la N-340, a su paso por el término municipal de Alcalá de Xivert, según fuentes de la Guardia Civil.
El choque sólo causó daños materiales. El camión que registró la fuga transportaba 23.000 litros de gasóleo y 10.060 litros de gasolina en sendos compartimentos, según informó el Gobierno Civil de Cástellón. Este camión, matrícula B-5683-LN, pertenece a la empresa Ham, SA, de Barcelona, y transportaba combustible de la compañía Total, SA. Según el Centro Coordinador de Emergencias de la Generalitat, esta empresa envió varios equipos técnicos desde Barcelona para dirigir el trasvase del líquido del camión accidentado a otra cuba.
El tramo cortado como consecuencia de este segundo accidente fue el comprendido entre Alcossebre y Torreblanca.
Tráfico desvió a los automóviles que circulaban por la N-340 hacia las carreteras locales de Alcossebre y de Capicor. A primera hora de la madrugada, la autopista A-7 había sido abierta en dirección Barcelona y continuaba cerrada en el sentido a Castellón. Las grúas trabajaban en la retirada de los camiones accidentados de la N-340, que se abría alternativamente en cada uno de los sentido.