Peugeot condiciona el futuro de Villaverde a una importante renovación de la plantilla

El futuro de la planta de ensamblaje de vehículos que la firma Peugeot posee en Villaverde (Madrid) está pendiente del resultado de las conversaciones que empresa y sindicatos mantienen en el marco de la negociación del convenio colectivo.

Las obras civiles de preparación (para pasar a producir un nuevo modelo en lugar del 205 que produce en la actualidad) fueron suspendidas hace dos semanas por el máximo ejecutivo de la filial española, Thierry Armengaud, "para que el tiempo no jugase en contra nuestra". La decisión de continuar con las inversiones deberá tomarse "cuanto antes ya q...

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El futuro de la planta de ensamblaje de vehículos que la firma Peugeot posee en Villaverde (Madrid) está pendiente del resultado de las conversaciones que empresa y sindicatos mantienen en el marco de la negociación del convenio colectivo.

Las obras civiles de preparación (para pasar a producir un nuevo modelo en lugar del 205 que produce en la actualidad) fueron suspendidas hace dos semanas por el máximo ejecutivo de la filial española, Thierry Armengaud, "para que el tiempo no jugase en contra nuestra". La decisión de continuar con las inversiones deberá tomarse "cuanto antes ya que las modificaciones más importantes tienen que realizarse durante el mes de agosto". De lo contrario la factoría de Villaverde se vería abocada a una muerte dulce con un periodo de vida semejante al del modelo 205 al que se puede augurar unos cuatro a cinco años de producción.

A principios de año eran 5.700 empleados, tras una reducción en 1991 de más de 600 trabajadores que supuso una "inversión para el futuro" de 4.500 millones de pesetas (en bajas anticipadas). El resultado después de impuestos de la firma francesa en 1991 se redujo de 8.300 a 1.000 millones de pesetas, tras caer las matriculaciones de 102.623 en 1990 a 84.762 el año pasado.

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