El concejal Astudillo asegura que no hay baches en el nuevo circuito para 'bicis'

Gabriel Astudillo, concejal de Deportes, ha declarado a la agencia Servimedia que no hay baches en el circuito ciclista de la Casa de Campo inaugurado el domingo por el alcalde (véase EL PAÍS del lunes). El concejal aseguró que él mismo había recorrido los 6.400 metros del trazado y que no había encontrado "ni un solo bache", y se mostró orgulloso por el hecho de que el circuito hubiera sido utilizado por numerosas escuelas de cicloturismo el día de la inauguración.

Sin embargo, las dificultades del suelo se aprecian con facilidad, informa Luis Fernando Durán. Los primeros me...

Gabriel Astudillo, concejal de Deportes, ha declarado a la agencia Servimedia que no hay baches en el circuito ciclista de la Casa de Campo inaugurado el domingo por el alcalde (véase EL PAÍS del lunes). El concejal aseguró que él mismo había recorrido los 6.400 metros del trazado y que no había encontrado "ni un solo bache", y se mostró orgulloso por el hecho de que el circuito hubiera sido utilizado por numerosas escuelas de cicloturismo el día de la inauguración.

Sin embargo, las dificultades del suelo se aprecian con facilidad, informa Luis Fernando Durán. Los primeros metros incluyen dos baches notables y son los que presentan el firme en peor estado. Además, el kilómetro 0,5 ofrece un clavo saliente de tres centímetros, de grosor que aún no ha sido tapado y que puede resultar peligroso para cualquier ciclista en caso de una posible caída. El resto de esta zona inicial está bastante agrietado y a su paso las bicicletas tiemblan con facilidad.

En los kilómetros 2 y 4 y en varios puntos de la calzada se acumula una arenilla que puede originar el derrape y el desequilibrio de algunos ciclistas. Aparte de los baches laterales de los kilómetros intermedios, hay también riesgo para los ciclistas en la cuesta de las Garavitas, donde el asfalto está ondulado al crecer las raíces de los árboles.También existen otros puntos del circuito, como la zona de mayor pendiente, en los que el firme presenta unos sorprendentes desniveles para los ciclistas que lleven algo de velocidad.

Por otra parte, los planos del circuito, que el Ayuntamiento de Madrid ha repartido entre los ciclistas para orientarlos, no se ajustan a las señales verticales que figuran en la calzada. De esta forma el kilómetro 0 reflejado en el itinerario no se corresponde con el indicado en el folleto difundido por la Concejalía de Deportes.