Tribuna:

Pájaro en mano

Las apuestas por un mejor futuro económico no excluyen la retirada puntual de beneficios sobre todo cuando hay que pasar el filtro de la publicación de un índice de precios al consumo (IPC) sobre el que sólo hay estimaciones extraoficiales. La rapidez con que el dinero entró al mercado ha sido similar a la empleada ayer en la salida, lo cual no quiere decir que se haya agotado con ello la orientación alcista.

La Bolsa española se encuentra en uno de esos momentos críticos en los que hace falta tener las cosas muy claras para mantener posiciones. El nivel del 265% aparece como la primera...

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Las apuestas por un mejor futuro económico no excluyen la retirada puntual de beneficios sobre todo cuando hay que pasar el filtro de la publicación de un índice de precios al consumo (IPC) sobre el que sólo hay estimaciones extraoficiales. La rapidez con que el dinero entró al mercado ha sido similar a la empleada ayer en la salida, lo cual no quiere decir que se haya agotado con ello la orientación alcista.

La Bolsa española se encuentra en uno de esos momentos críticos en los que hace falta tener las cosas muy claras para mantener posiciones. El nivel del 265% aparece como la primera resistencia seria que el mercado debe vencer para confirmar sus posibilidades a corto plazo.

Este punto adquiere mayor relevancia si se tiene en cuenta que en él coincidirán la directriz bajista y el nivel de resistencia a finales de este mes, es decir, que es como un callejón sin salida en el que, por fuerza, hay que tomar una decisión.

En ese sentido, una confusa información que señaló una caída de 77 puntos en Wall Street en su apertura -cuando fueron en torno a siete puntos- influyó negativamente, lo cual hizo que el índice perdiera 1,13 puntos, un 0,44%, cifra exactamente igual a la que perdió el Ibex 35.

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