Mil personas se manifiestan contra la ampliación del aeropuerto de Barajas

Un millar de personas, convocadas por la coordinadora de entidades ciudadanas que se oponen a la ampliación del aeropuerto de Madrid-Barajas, se manifestaron ayer ante sus instalaciones para exigir al Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) que "reconsidere el proyecto por ser lesivo para Madrid". Los organizadores de la protesta consideran que la ampliación conllevará elevados índices de contaminación acústica y atmosférica para los 500.000 vecinos de la zona.

La marcha transcurrió sin incidentes, bajo un sol sofocante, desde el barrio de la Alameda de Osuna hasta la term...

Un millar de personas, convocadas por la coordinadora de entidades ciudadanas que se oponen a la ampliación del aeropuerto de Madrid-Barajas, se manifestaron ayer ante sus instalaciones para exigir al Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) que "reconsidere el proyecto por ser lesivo para Madrid". Los organizadores de la protesta consideran que la ampliación conllevará elevados índices de contaminación acústica y atmosférica para los 500.000 vecinos de la zona.

La marcha transcurrió sin incidentes, bajo un sol sofocante, desde el barrio de la Alameda de Osuna hasta la terminal norte del aeropuerto. Una vez allí, el presidente de la Unión Europea contra el Ruido de los Aviones, André Looten, invitado por la coordinadora, pronunció unas palabras de agradecimiento ante los congregados. Hoy Looten será recibido por el director del aeropuerto de Barajas, Fernando Mosquera, y visitará las instalaciones. Para Andrés Martínez, miembro de la coordinadora de entidades ciudadanas, la magnitud del proyecto, calificado de "obra faraónica", representará un considerable aumento del tráfico aéreo sobre zonas habitadas.

Esta "agresión" supondrá para los 500.000 habitantes del entorno del aeropuerto un aumento de los índices de contaminación acústica y atmosférica, alcanzando cotas de ruido "superiores a las permitidas en la normativa europea, que se traducirán en graves trastornos físicos y psíquicos", según Martínez.

Otro temor expresado por los integrantes de la marcha es el notable incremento del riesgo potencial que la ampliación llevará aparejada para los moradores de las poblaciones cercanas, así como de las propias aeronaves que las sobrevuelen.

Entre los asistentes a la manifestación se encontraban miembros de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos, numerosos concejales de Izquierda Unida de los municipios afectados, así como el alcalde de Coslada, José Huélamo, miembro también de la coalición.

Para Huélamo, que recuerda haberse opuesto al proyecto de ampliación, desde el año 1983, momento en que apareció el primer borrador, la solución podría pasar por la utilización de las pistas de la base militar de Torrejón de Ardoz, situada a escasos cinco kilómetros del aeropuerto, máxime cuando "ya se han marchado los norteamericanos".

Interés especulativo

Para los miembros de la coordinadora, la "tozudez" de la Administración en llevar a cabo el proyecto obedece a un "simple interés especulativo inmobiliario sobre los suelos calificados en el planeamiento vigente de Madrid como no urbanizables". Por este motivo, la coordinadora continuará con una campaña de información y recogida de firmas entre todos los vecinos encaminada a pedir al alcalde de Madrid que no incluya en la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad la superficie de suelo prevista para uso aeroportuario, tal como recoge el plan del MOPT.

[El proyecto de ampliación, que multiplica por cuatro el espacio ocupado por el aeropuerto, prevé la sustitución de las dos pistas actuales, que están cruzadas, por cuatro paralelas y una quinta para casos de emergencia, informa Efe. El ministeriopretende así afrontar el fuerte incremento de viajeros previsto para los próximos años].