Poca deportividad

Que lo quiera o no EL PAÍS, el boxeo, pese a ser uno de los deportes más antiguos de la humanidad, está también considerado oficialmente como deporte olímpico, y figura como tal en las publicaciones vinculadas a los Juegos Olímpicos.La porfía de EL PAÍS en ofrecer a sus lectores la sola cara negativa de ese deporte (artículos sobre las consecuencias físicas y psíquicas de los golpes, el proceso de Mike Tyson, hasta los breves, sobre delitos cometidos por boxeadores, estos últimos apareciendo en las páginas de deporte, etcétera) y la mera omisión del boxeo en la colección de láminas de deportes...

Que lo quiera o no EL PAÍS, el boxeo, pese a ser uno de los deportes más antiguos de la humanidad, está también considerado oficialmente como deporte olímpico, y figura como tal en las publicaciones vinculadas a los Juegos Olímpicos.La porfía de EL PAÍS en ofrecer a sus lectores la sola cara negativa de ese deporte (artículos sobre las consecuencias físicas y psíquicas de los golpes, el proceso de Mike Tyson, hasta los breves, sobre delitos cometidos por boxeadores, estos últimos apareciendo en las páginas de deporte, etcétera) y la mera omisión del boxeo en la colección de láminas de deportes olímpicos son una prueba de poca deportividad, de manipulación informativa y de poca consideración de las facultades críticas del lector.-