La paz tardará y aún en llegar a la EMT
La situación en la Empresa Municipal de Transportes (EMT) es como la de una ciudad bombardeada en tiempos de guerra. Sus responsables hablan de la necesidad de recobrar la paz (laboral) e iniciar la reconstrucción (social). Ayer se reunieron con los representantes de la Plataforma Sindical, entre ellos los ocho despedidos, y afirmaron que habían notado un talante nuevo. Pero a ninguno se les escapó que quedan pendientes muchos puntos de fricción y que la normalidad aún tardará.
La Plataforma Sindical ha convocado hoy a los trabajadores de los autobuses madrileños a una asamblea, de dond...
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La situación en la Empresa Municipal de Transportes (EMT) es como la de una ciudad bombardeada en tiempos de guerra. Sus responsables hablan de la necesidad de recobrar la paz (laboral) e iniciar la reconstrucción (social). Ayer se reunieron con los representantes de la Plataforma Sindical, entre ellos los ocho despedidos, y afirmaron que habían notado un talante nuevo. Pero a ninguno se les escapó que quedan pendientes muchos puntos de fricción y que la normalidad aún tardará.
La Plataforma Sindical ha convocado hoy a los trabajadores de los autobuses madrileños a una asamblea, de donde deben emanar las directrices de su actuación para el futuro. Sus representantes se reunieron ayer con el director de la EMT, Tomás Burgaleta, y durante más de una hora intentaron inaugurar nuevas maneras. Lo consiguieron sólo a medias."He visto un talante nuevo, que no responde a las palabras y comportamientos de los últimos meses", comentó Burgaleta. La empresa había llamado a la Plataforma para que nombrara cuanto antes a los sustitutos de los sindicalistas despedidos.
Rodríguez Peña aceptó la declaración de buenas intenciones de la empresa, pero se mantuvo firme. "Comunicaremos el lunes el nombre de los sustitutos, pero algunos de los despedidos estaremos en las negociaciones del convenio como asesores, con voz pero sin voto", comentó.
Pero la nueva etapa fue sólo una declaración de intenciones, "sin nada tangible", como dijo Rodríguez Peña. De momento, ambas partes recurrirán la sentencia del Juzgado de Social que declaró procedente el despido de ocho dirigentes de la Plata forma y estimó nulo el de otros 19 trabajadores.
La Plataforma quiere que la buena voluntad de la empresa se manifieste en la suspensión de otros 25 despidos que pesan sobre militantes del sindicato por incidentes ocurridos durante la huelga de 66 días. El sindicato quiere también hablar de los trabajadores contratados a los que no se les ha renovado el contrato durante el conflicto y de la propia negociación del convenio.
Burgaleta reconoció que el recurso de la sentencia es una carta en la manga de la empresa de cara a las negociaciones y que del asunto de los 25 despedidos se puede, cuanto menos, hablar "cuando haya unos interlocutores legítimos de los trabajadores". El director de la EMT, es consciente de que "Ia reconstrucción laboral de la empresa no se podrá hacer en pocos meses".