AHV arrastra un 'agujero' de 60.000 millones en su fondo de previsiones, que deberá cubrir tras su fusión con Ensidesa

La nueva sociedad (internamente conocida por la letra V) que se cree mediante la fusión de Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya (AHV) tendrá que aportar entre 60.000 y 70.000 millones de pesetas a la dotación del fondo de pensiones de AHV para tapar el agujero que arrastra esta empresa. Esta cifra forma parte del coste laboral que tendrá que soportar la reestructuración del sector de siderurgia integral preparado por la Corporación de Siderurgia Integral y que se eleva a unos 300.000 millones de pesetas (véase EL PAÍS del 8 de marzo). La reducción de empleo, según el plan de viabilidad qu...

La nueva sociedad (internamente conocida por la letra V) que se cree mediante la fusión de Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya (AHV) tendrá que aportar entre 60.000 y 70.000 millones de pesetas a la dotación del fondo de pensiones de AHV para tapar el agujero que arrastra esta empresa. Esta cifra forma parte del coste laboral que tendrá que soportar la reestructuración del sector de siderurgia integral preparado por la Corporación de Siderurgia Integral y que se eleva a unos 300.000 millones de pesetas (véase EL PAÍS del 8 de marzo). La reducción de empleo, según el plan de viabilidad que se presenta hoy, es de 9.700 puestos de trabajo (3.500 en AHV sobre 7.000 y 6.200 en Ensidesa sobre 17.200 de todo el grupo).El coste total del plan se eleva a unos 620.000 millones de pesetas de hoy (se dispararían a más de 800.000 millones a final del plan, en el año 2000). Las mayores dificultades para poner en marcha el citado plan son la falta de fondos para financiar el nuevo proceso de ajuste.

De ellos, 170.000 millones responden a inversiones industriales. De esa cifra, 93.000 millones están destinadas a las factorías de Ensidesa, en Asturias, donde se cerrarán cuatro cabeceras (una ya está cerrada) y se potenciarán las dos de Veriña (Gijón), quedando una capacidad de 3,8 toneladas anuales. Los 77.000 restantes irán a las de AHV, en Vizcaya, donde está previsto que se cierren los actuales altos hornos para construir una acería compacta nueva con capacidad de 900.000 toneladas.

El Gobierno central ha pretendido que las administraciones regionales participen en el capital, que será de 290.000 millones tras la aportación de activos. Mientras el Gobierno vasco se ha mostrado más proclive a participar, el Principado de Asturias sólo quiere como máximo el 1%, lo que supone una aportación de 2.900 millones, informa Luis García. El presidente asturiano, Juan Luis Rodríguez-Vigil, ha calificado de simbólica esta participación y dice que la región carece de recursos.

Paralelamente, sigue sin despejarse la duda sobre el futuro de las acciones de AHV -más del 80%- que están en poder del Banco Exterior. El principal candidato es el INI, propietario de Ensidesa, según fuentes oficiales.