La crisis del Partido Socialista portugués provoca la caída de su líder, Sampaio

El líder del Partido Socialista portugués (PS), Jorge Sampaio, renunció ayer a presentarse de nuevo como candidato al cargo de secretario general tras ser derrotado en las elecciones de los compromisarios para el congreso del partido que se realizará dentro de tres semanas.La crisis abierta en los tres partidos de la oposición -socialista, comunista y democristiano- desde la victoria de Cavaco Silva en las elecciones generales de octubre del año pasado se encamina, en el caso de los socialistas, hacia el cambio de liderazgo, el segundo desde que Mario Soares fue elegido presidente de la repúbl...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El líder del Partido Socialista portugués (PS), Jorge Sampaio, renunció ayer a presentarse de nuevo como candidato al cargo de secretario general tras ser derrotado en las elecciones de los compromisarios para el congreso del partido que se realizará dentro de tres semanas.La crisis abierta en los tres partidos de la oposición -socialista, comunista y democristiano- desde la victoria de Cavaco Silva en las elecciones generales de octubre del año pasado se encamina, en el caso de los socialistas, hacia el cambio de liderazgo, el segundo desde que Mario Soares fue elegido presidente de la república.

El futuro secretario general es Antonio Gutérres, un joven del aparato que fue líder del grupo socialista en la anterior legislatura. Gutérres está ligado al sector católico no marxista del PS (sus adversarios le acusan de simpatizar con el Opus De¡) y confía obtener el apoyo del electorado centrista y de la derecha moderada. Sampaio asumió la dirección del partido después de la dramática renuncia de Vítor Constancio, que dimitió a los tres años de su elección como primer sucesor de Mario Soares, a quien acusé de permanentes injerencias en la vida interna del PS. Trató de establecer una plataforma de entendimiento con el padre fundador del partido sobre la base del respeto mutuo y de la separación de poderes, y alcanzó su mayor éxito al conseguir la alcaldía de Lisboa con apoyo comunista.

Las elecciones municipales de diciembre de 1989, en las que el PS -con el 32,3% de los votos consiguió arrebatar a los socialdemócratas de Cavaco Silva la casi totalidad de los ayuntamientos de las principales ciudades portuguesas, crearon en los militantes y miembros del aparato del partido la ilusión de un rápido regreso al poder. Después de la reelección de Soares a la presidencia, en enero de 1991, los socialistas esperaban impedir a Cavaco Silva conquistar de nuevo la mayoría absoluta en los comicios de octubre de 1991, pero los resultados frustraron esta expectativa y Sampaio fue acusado de la derrota del PS, que obtuvo el 29,3% de los votos cuando su objetivo mínimo era un 33%.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En