Cartas al director

A vueltas con la justicia

Escribo esta carta para que se sepa de qué manera la justicia puede destrozar la vida de una persona, como ellos dicen, delincuentes rehabilitados y aptos para vivir en esta sociedad. Mi aventura empieza cuando salí de cumplir condena de tres años en Nanclares de Oca, en enero del 86. Creí que salía en paz con dicha justicia. Antes de cumplir esta condena ya había estado otras veces en prisión, en Carabanchel, por lo que era ya un delincuente habitual. Eran cosas que no pasaban de los tres meses de condena, las cuales fui pagando según las hacía. Me compré una moto y me pu...

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Escribo esta carta para que se sepa de qué manera la justicia puede destrozar la vida de una persona, como ellos dicen, delincuentes rehabilitados y aptos para vivir en esta sociedad. Mi aventura empieza cuando salí de cumplir condena de tres años en Nanclares de Oca, en enero del 86. Creí que salía en paz con dicha justicia. Antes de cumplir esta condena ya había estado otras veces en prisión, en Carabanchel, por lo que era ya un delincuente habitual. Eran cosas que no pasaban de los tres meses de condena, las cuales fui pagando según las hacía. Me compré una moto y me puse a trabajar de mensajero, y cuando creía que todo iba bien, cuál no fue mi sorpresa cuando, en julio de 1986, recibí una citación para un juicio del año 1983, en el que se me piden tres meses de condena. En el juicio se queda en dos meses, de lo que nadie me dice nada ni me comunican nada. Pasa el tiempo, y el 18 de diciembre viene la policía a mi casa: tengo que pagar los dos meses. No sirve de nada tu trabajo ni que tengas fecha para casarte. Hay que pagarlo. Porque un señor no ha tenido tiempo de mirar los papeles en tres años. Pasa que de la cárcel salí enganchado a la heroína, y me destrozaron la vida, y tardé cuatro meses en caer preso otra vez, y así una y otra vez.Hoy llevo desde el 4 de abril en la calle, y hace unos 15 días vino la policía a casa, que estoy en busca y captura por el año y tres meses que pagué. Yo tengo mis papeles de libertad, pero la justicia española es así, y si esto es justicia, que venga Dios y lo vea.-

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