Indecisiones y tanteos

La tranquilidad, aunque un tanto forzada, ha llegado a los mercados de valores después de las fuertes bajas anteriores. Los argumentos para esta reacción están más en la estabilidad de Wall Street que en cualquier cambio en la situación económica española. Los inversores, poco convencidos de la capacidad de reacción del mercado, piensan, no obstante, que si el monolito del parqué ha perdido el epitafio a los caldos otras cosas pueden cambiar en el mercado, entre ellas el ambiente.Los datos que llegan de Estados Unidos, recibidos con una pequeña subida en la Bolsa, no son como para animar a nad...

La tranquilidad, aunque un tanto forzada, ha llegado a los mercados de valores después de las fuertes bajas anteriores. Los argumentos para esta reacción están más en la estabilidad de Wall Street que en cualquier cambio en la situación económica española. Los inversores, poco convencidos de la capacidad de reacción del mercado, piensan, no obstante, que si el monolito del parqué ha perdido el epitafio a los caldos otras cosas pueden cambiar en el mercado, entre ellas el ambiente.Los datos que llegan de Estados Unidos, recibidos con una pequeña subida en la Bolsa, no son como para animar a nadie a tomar posiciones a corto plazo y esto es lo que han decidido una vez más los inversores españoles. El volumen negociado, como consecuencia, se ha quedado por debajo de los 10.000 millones de pesetas efectivas, un dato a tener en cuenta a la hora de evaluar las posibilidades de una vuelta de la tendencia. De momento, el soporte del 240% está siendo efectivo, en parte porque las instituciones están empeñadas en ello y, también, porque los mercados internacionales permiten un pequeño respiro. Al final, y tras una sesión llena de indecisiones, el índice, consigue recuperar 1,45 puntos, precisamente en el momento en que el Dow Jones perdía fuerza y sólo recuperaba tres puntos.