Tribuna:

Tensa espera

La Bolsa no ha sido capaz de definir una conducta concreta en esta sesión, tanto porque los mercados internacionales no han lanzado nuevas señales como porque a nivel interno nadie se ha molestado en aportar datos sobre la evolución económica. Los inversores, en consecuencia, han optado por el goteo a la baja, postura que no han cambiado ni siquiera a la hora del cierre de la sesión.El volumen negociado empieza a dar muestras de agotamiento, lo que le sitúa ya en la frontera de los 10.000 millones de pesetas, una tendencia que los analistas han previsto y que debe ser el paso previo a la final...

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La Bolsa no ha sido capaz de definir una conducta concreta en esta sesión, tanto porque los mercados internacionales no han lanzado nuevas señales como porque a nivel interno nadie se ha molestado en aportar datos sobre la evolución económica. Los inversores, en consecuencia, han optado por el goteo a la baja, postura que no han cambiado ni siquiera a la hora del cierre de la sesión.El volumen negociado empieza a dar muestras de agotamiento, lo que le sitúa ya en la frontera de los 10.000 millones de pesetas, una tendencia que los analistas han previsto y que debe ser el paso previo a la finalización de la orientación bajista. del mercado. El problema de fondo está en la falta de acuerdo sobre el nivel adecuado de operaciones que indique el punto final de la corriente vendedora y de la consecuente absorción institucional.

La apertura de Wall Street, otra vez a la baja, tampoco sirvió para animar a la inversión española a tomar decisiones, situación que según los analistas internacionales podría mantenerse y forzar un nuevo recorte en la Bolsa de Nueva York. La conclusión final es que la desconfianza es la actitud más adecuada ante unos mercados poco dispuestos a las alegrías. El índice bajó al cierre 1,09 puntos y se sitúa ya por debajo del 246%.

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