Lejos queda Moscú

El índice provisional de la Bolsa de Barcelona volvió a marcar un suave descenso tras una sesión irregular centrada en determinados valores que no consiguieron elevar el escaso volumen de contratación que registra el mercado.Por una vez la práctica diaria de los inversores dio la razón al aséptico y frío análisis de la teoría de los expertos. Para el Nobel Maurice Allais los mercados internacionales sufren una interdependencia falsa, reflejando en los corros de aquí lejanos acontecimientos de allá que difícilmente tienen derecho a modificar el precio de una acción. Y el parqué ba...

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El índice provisional de la Bolsa de Barcelona volvió a marcar un suave descenso tras una sesión irregular centrada en determinados valores que no consiguieron elevar el escaso volumen de contratación que registra el mercado.Por una vez la práctica diaria de los inversores dio la razón al aséptico y frío análisis de la teoría de los expertos. Para el Nobel Maurice Allais los mercados internacionales sufren una interdependencia falsa, reflejando en los corros de aquí lejanos acontecimientos de allá que difícilmente tienen derecho a modificar el precio de una acción. Y el parqué barcelonés dio la razón al maestro con su cierre a la baja, sin hacer caso del ejemplo de Nueva York primero y de Francfort horas más tarde, que firmaron sendos repuntes.

Las espectativas poco optimistas de un consejo extraordinario del Gobierno de aquí, para estudiar con más detenimiento los problemas económicos del país, se impusieron a las grandes cumbres políticas de allá, en el lejano Moscú, donde las decisiones quizá sean más profundas pero menos inmediatas.

En fin, apatía general y descensos generalizados, especialmente significativos en el sector cementero.

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