Y además es imposible

La Bolsa retomó el ambiente. negativo en esta última sesión, tal y como se esperaba, ante la constante huida de dinero y un entorno internacional que continúa sin ofrecer movimientos concretos. La reacción técnica cumplió su objetivo al alejar al índice de las proximidades del 265%, aunque es de destacar la fuerza con que la tendencia bajista ha vuelto al mercado.Las operaciones institucionales son la alternativa a un mercado inoperante, en cuanto se refiere al volumen negociado, y si en la sesión del pasado martes era el 17,5% de Vilesa lo que cambiaba de manos, ayer fue una aplicación sobre ...

La Bolsa retomó el ambiente. negativo en esta última sesión, tal y como se esperaba, ante la constante huida de dinero y un entorno internacional que continúa sin ofrecer movimientos concretos. La reacción técnica cumplió su objetivo al alejar al índice de las proximidades del 265%, aunque es de destacar la fuerza con que la tendencia bajista ha vuelto al mercado.Las operaciones institucionales son la alternativa a un mercado inoperante, en cuanto se refiere al volumen negociado, y si en la sesión del pasado martes era el 17,5% de Vilesa lo que cambiaba de manos, ayer fue una aplicación sobre algo más de medio millón de cenrales lo que animó una sesión que resultó sumamente aburrida.

La apertura de Wall Street apenas consiguió frenar la salida de papel, a pesar de apuntarse unos cuantos puntos en sentido alcista, y es que para que el dinero vuelva a la Bolsa española va a hacer falta algo más que el simple sostenimiento del Dow Jones. Lo que suceda en la subasta de letras del Tesoro de esta mañana puede ser un punto importante para ayudar, o no, a la Bolsa a salir del actual bache. El último dato que aportó el mercado madrileño antes de que se cayera el sistema informático arrojaba un descenso de 2,30 puntos que abre otra vez las puertas a la incertidumbre.