Tribuna:

Inercia alcista

La Bolsa no ha conseguido alcanzar un nivel aceptable en cuanto a la contratación, aunque eso no ha impedido que la reacción técnica iniciada la semana anterior siguiera en esta jornada con cierta fuerza. El avance de Wall Street el viernes, unido a una nueva subida en Tokio en la madrugada de ayer, han permitido el juego técnico, pero sin que el dinero dé muestras de tomarse la cosa muy en serio.Los grandes mercados internacionales se encuentran, al igual que la Bolsa española, en plena reacción técnica y con un futuro muy poco claro por delante, lo que justifica sobradamente las múltiples pr...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La Bolsa no ha conseguido alcanzar un nivel aceptable en cuanto a la contratación, aunque eso no ha impedido que la reacción técnica iniciada la semana anterior siguiera en esta jornada con cierta fuerza. El avance de Wall Street el viernes, unido a una nueva subida en Tokio en la madrugada de ayer, han permitido el juego técnico, pero sin que el dinero dé muestras de tomarse la cosa muy en serio.Los grandes mercados internacionales se encuentran, al igual que la Bolsa española, en plena reacción técnica y con un futuro muy poco claro por delante, lo que justifica sobradamente las múltiples precauciones que están adoptando los inversores. La multinacional Bayern, que se estrenaba ayer en el mercado español ' sufrió las consecuencias de un ambiente indeciso y poco dado a las novedades. Incluso el conjunto de la Bolsa estuvo a punto de venirse abajo ante una apertura negativa en Wall Street, situación que se corrigió rápidamente al alza y permitió un cierre más tranquilo.

Si la contratación había sido baja durante toda la sesión, tres operaciones consiguieron mejorar ese aspecto del mercado a última hora de la tarde: el 1% de Aumar, 175.600 centrales y 100.000 títulos del Bilbao-Vizcaya. El índice terminó subiendo 2,46 puntos.

Archivado En