Tribuna:

Apenas queda papel

El papel está desapareciendo del mercado de valores a pesar de que las bolsas internacionales continúan sembrando la duda a lo largo y ancho del sistema financiero. La semana comenzó con un importante recorte en Tokio, en una decisión aparentemente meditada durante todo el fin de semana, y que mantuvo a la baja a la bolsa española a lo largo de la mañana. El volumen negociado indicaba, hasta ese momento, una indecisión parecida por parte de compradores y vendededores, situación que se rompió a primeras horas de la tarde, cuando Wall Street abrió con una ligera subida que después no pudo manten...

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El papel está desapareciendo del mercado de valores a pesar de que las bolsas internacionales continúan sembrando la duda a lo largo y ancho del sistema financiero. La semana comenzó con un importante recorte en Tokio, en una decisión aparentemente meditada durante todo el fin de semana, y que mantuvo a la baja a la bolsa española a lo largo de la mañana. El volumen negociado indicaba, hasta ese momento, una indecisión parecida por parte de compradores y vendededores, situación que se rompió a primeras horas de la tarde, cuando Wall Street abrió con una ligera subida que después no pudo mantener. Los comentarios sobre la reacción de este mercado se centraron entonces en las expectativas sobre el IPC de mayo, que podría mantenerse sin alteraciones.Otro de los factores favorables a una toma de posiciones en la bolsa están en el hecho de que la semana empieza sin presión vendedora, lo que puede ser aprovechado por, el corto plazo para intentar algunos movimientos puntuales. Si el IPC resulta nulo, como espera la barandilla, la bolsa podría intentar alguna mejora, aunque a la hora de cerrar la sesión había ya demasiadas dudas sobre esa posibilidad debido a la orientación a la baja de la bolsa norteamericana. Al final, el índice subió 1,03 puntos.

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