!Hola, Sofía"

La llegada de la infanta Cristina a Roland Garros causó un pequeño revuelo en la colonia tenística española. La Infanta, que vive en París desde hace unos meses, se encontró con Agustí Pujol, presidente de la Federación Española, y con él se dirigió a la grada de invitados de la pista 11, donde Carlos Costa peleaba con Michael Stich. Allí estaba Manuel Orantes, capitán del equipo español de Copa Davis, quien sufrió un lapsus al saludar a la Infanta: "Hola, Sofia", le dijo al estrecharle la mano. Y Cristina sonrió educadamente."No es verdad, no es verdad", dijo luego Orantes, sonriendo, tras su...

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La llegada de la infanta Cristina a Roland Garros causó un pequeño revuelo en la colonia tenística española. La Infanta, que vive en París desde hace unos meses, se encontró con Agustí Pujol, presidente de la Federación Española, y con él se dirigió a la grada de invitados de la pista 11, donde Carlos Costa peleaba con Michael Stich. Allí estaba Manuel Orantes, capitán del equipo español de Copa Davis, quien sufrió un lapsus al saludar a la Infanta: "Hola, Sofia", le dijo al estrecharle la mano. Y Cristina sonrió educadamente."No es verdad, no es verdad", dijo luego Orantes, sonriendo, tras su equivocación. "Si conozco a la Infanta desde hace años. Es mi compañera de dobles en los partidos de paddle tenis". También sonriendo, su mujer, Rosa, descubría otro pequeño secreto de su relación: "Cuando juegan juntos, Manolo siempre se equivocaba. Le dice: 'Tuya...., perdón ...suya". "Es que en un partido siempre me sale el tuteo", apuntó Orantes.

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