Paso a paso

paréntesis del lunes ha sentado bien al mercado barcelonés. La sesión se abrió en los corros con dinero para algunos valores cementeros y siderúrgicos. Las posiciones compradoras fueron ganando terreno en la contratación electrónica de la tarde. La bolsa está recuperando el pulso poco a poco a medida que se alcanza el ecuador del año. El llamamiento a la moderación salarial realizado por el gobernador del Banco de España, el descenso de la rentabilidad de las supercuentas y las expectativas de nuevas bajadas de tipos de interés están animando sesión tras sesión el mercado de renta variable. Fa...

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paréntesis del lunes ha sentado bien al mercado barcelonés. La sesión se abrió en los corros con dinero para algunos valores cementeros y siderúrgicos. Las posiciones compradoras fueron ganando terreno en la contratación electrónica de la tarde. La bolsa está recuperando el pulso poco a poco a medida que se alcanza el ecuador del año. El llamamiento a la moderación salarial realizado por el gobernador del Banco de España, el descenso de la rentabilidad de las supercuentas y las expectativas de nuevas bajadas de tipos de interés están animando sesión tras sesión el mercado de renta variable. Falta, sin embargo, un aumento significativo del volumen de negocio. La negociación en Barcelona ha alcanzado 3.000 millones de pesetas diarios en las dos últimas sesiones, pero más por el aumento de los cambios que por la llegada de dinero nuevo.Paralelamente, en algunos valores llegan las tomas de beneficios. La salida de papel está permitiendo que las subidas se afiancen paso a paso para dar oportunidad al dinero de fijar un umbral para establecer las plusvalías. El dinero comienza a perder el miedo a la volatilidad y se siente más seguro. Sólo una brusca oscilación de las primeras bolsas internacionales puede hacer variar el actual rumbo.

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