GENTE

Zelia Cardoso de Melo,

ministra de Economía de Brasil, sembró el pánico en la cena de gala que el Gobierno brasileño ofreció el pasado martes al príncipe Carlos de Inglaterra y a su esposa, Diana de Gales, al aparecer con un suntuoso abrigo de pieles blanco. La prensa brasileña interpretó ayer este gesto como una grave falta ecológica en una fiesta en honor de un principe notoriamente preocupado por los temas relacionados con la defensa de la naturaleza, que se encuentra de visita oficial en Brasil. Cardoso de Melo, de 37 años, se excusó diciendo que se trataba de piel sintética, aunque una de las invi...

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ministra de Economía de Brasil, sembró el pánico en la cena de gala que el Gobierno brasileño ofreció el pasado martes al príncipe Carlos de Inglaterra y a su esposa, Diana de Gales, al aparecer con un suntuoso abrigo de pieles blanco. La prensa brasileña interpretó ayer este gesto como una grave falta ecológica en una fiesta en honor de un principe notoriamente preocupado por los temas relacionados con la defensa de la naturaleza, que se encuentra de visita oficial en Brasil. Cardoso de Melo, de 37 años, se excusó diciendo que se trataba de piel sintética, aunque una de las invitadas a la cena realizada en el palacio Itamaraty, de Río de Janelro, la columnista Hildegard Angel, afirmó que el abrigo de la ministra era de visón blanco. El diario O Globo fue más allá al asegurar que Zelia Cardoso de Melo optó por vestir el abrigo, a pesar de los 27 grados de temperatura que marcaba el termómetro, para ocultar un indiscreto escote en la espalda de su vestido negro. También ayer Diana de Gales fue objeto de un comentario en la prensa londinense al revelar el diario The Times que la princesa ha viajado a Brasil, la principal potencia cafetera del mundo, con un bote de café descafeinado.

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