Tribuna:

Sobre la fría estadística

La prácticamente absoluta liberalización del mercado de capitales fue un clamor eufórico en las bolsas que, sin embargo, no acabó de reflejarse en los índices generales. A juicio de los analistas, éste es e último descuento de una expectativa clara de tendencia bajista de los tipos de interés. Al hecho consumado de que se abarata el dinero, los inversores añadieron los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre los beneficios por acción de las sociedades cotizadas. La estadística en sí misma no hace más que reflejar contablemente un dato conocido: la gran caída de los re...

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La prácticamente absoluta liberalización del mercado de capitales fue un clamor eufórico en las bolsas que, sin embargo, no acabó de reflejarse en los índices generales. A juicio de los analistas, éste es e último descuento de una expectativa clara de tendencia bajista de los tipos de interés. Al hecho consumado de que se abarata el dinero, los inversores añadieron los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre los beneficios por acción de las sociedades cotizadas. La estadística en sí misma no hace más que reflejar contablemente un dato conocido: la gran caída de los resultados en los grupos químicos y siderometalúrgicos y, paralelamente, un balance algo más positivo en los cementerios e inmobiliarios y bastante bueno, dadas las circunstancias, para los constructores.El punto de vista psicológico que acompañó al dato cerró, por tanto, un ciclo bajista, que lo ha sido más por factores exógenos -básicamente la crisis del Golfo- que por causas intrínsecas del mercado. Los despachos de las sociedades de Bolsa recogieron ayer este ángulo optimista a partir del cual se abre la luz a todo tipo de pronósticos favorables a la consolidación de los cambios y en general a la reactivación de la inversión.

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