El mercado norteamericano
Las grandes cadenas de televisión norteamericanas han disparado el mercado de los expertos militares, que ya se cotizan entre las 50.000 y las 100.000 pesetas diarias. La ABC y NBC tienen diariamente cuatro especialistas cada una; la CBS, tres, y la CNN ha utilizado, desde el inicio de la crisis del golfo Pérsico, a medio centenar de expertos.Los telespectadores españoles tienen también la oportunidad de seguir los análisis de estos expertos, a través de los noticiarlos de la ABC y, la CBS, que se emiten el Canal + y TVE, respectivamente.
La mayoría de estos analistas son generales reti...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Las grandes cadenas de televisión norteamericanas han disparado el mercado de los expertos militares, que ya se cotizan entre las 50.000 y las 100.000 pesetas diarias. La ABC y NBC tienen diariamente cuatro especialistas cada una; la CBS, tres, y la CNN ha utilizado, desde el inicio de la crisis del golfo Pérsico, a medio centenar de expertos.Los telespectadores españoles tienen también la oportunidad de seguir los análisis de estos expertos, a través de los noticiarlos de la ABC y, la CBS, que se emiten el Canal + y TVE, respectivamente.
La mayoría de estos analistas son generales retirados y aseguran que su única intención es traducir a sus compatriotas las tácticas militares desplegadas en Oriente Próximo, informa Reuter. Las críticas no han tardado en llegar.
Según John Katz, ex productor del informativo matinal de la CBS y actualmente crítico de prensa, "el amor de los generales a la tecnología" está provocando que los norteamericanos reciban una imagen de la guerra "de color de rosa". "Recuerdo a un general que describió los primeros bombardeos de forma gratificante", añade Katz.
El crítico subraya que es la primera vez en la historia que los generales han sido llamados para explicar una guerra. "Curiosamente son los mismos que han promovido el armamento que está utilizando EE UU", apuntan.
Los militares apelan a su imparcialidad. George Crist, un general retirado contratado por la CBS, afirma que su único propósito es comentar la guerra objetivamente: "Estoy retirado y por tanto no tengo intereses creados". Crist, conscíente de que la información que aporta el Pentágono "no es toda la que cabría esperar", asegura que no ha utilizado ni utilizará sus estrellas "como factor de intimidación para obtener información extra".