Los ministros de la CE acuerdan reducir formalidades aduaneras

Los ministros de la Comunidad Europea que se ocupan de cuestiones de mercado interior acordaron ayer suprimir, a partir del 1 de enero de 1992, algunas de las formalidades aduaneras en el transporte de mercancías dentro del territorio comunitario.Con el fin de agilizar la libre circulación de mercancías en el interior de la CE, los ministros han decidido abolir todos los requisitos a los que están sujeto." los transportistas, tales como el carné de transporte internacional por carretera (TIR) y el certificado de admisión temporal (ATA).

A partir de enero de 1992, los transportistas que ...

Los ministros de la Comunidad Europea que se ocupan de cuestiones de mercado interior acordaron ayer suprimir, a partir del 1 de enero de 1992, algunas de las formalidades aduaneras en el transporte de mercancías dentro del territorio comunitario.Con el fin de agilizar la libre circulación de mercancías en el interior de la CE, los ministros han decidido abolir todos los requisitos a los que están sujeto." los transportistas, tales como el carné de transporte internacional por carretera (TIR) y el certificado de admisión temporal (ATA).

A partir de enero de 1992, los transportistas que deban atravesar las fronteras interiores y exteriores de la CE ya no tendrán que llevar una placa azul y blanca en la parte trasera de sus vehículos, hasta ahora necesaria para ideritifilcar que la mercancía era de tipo TIR.

Adernás, los productos que deban permanecer temporalmente en el territorio de un país; distinto al del que proceden no tendrán que cumplir ningún requisito aduanero gracias a la abolición del ATA, creado por la, Convención de Bruselas de 1961.

Esta posición común de los Doce, que se anticipa un año a la apertura del mercado único, reducirá costes en el sector del transporte, además de conseguir que el paso de las fronteras se realice más rápido.

Por otra parte, la Comisión Europea autorizó al Ministerio de Industria español a adoptar medidas de salvaguardia para restringir durante todo 1991 la importación de tres clases de abonos procedentes de los demás Estados Miembros de la CE. Estos productos son la urea, el nitrato amónico y los abonos complejos con más del 10% de nitrógeno.