Contratiempos de toda índole

Casi veinticuatro horas de angustia les costó a cuatro ciudadanos franceses que viajaban a bordo del velero Adore, volver a la tranquilidad después de que, en la tarde del pasado domingo, su embarcación perdiera el rumbo y navegara a la deriva por la asturiana bahía de Ribadesella durante toda la noche, la mañana y buena parte de la tarde de ayer.Finalmente, y después de haberle sido perdido el rastro por las fuerzas de rescate, los tripulantes lograron llegar por sus propios medios a la bahía de Santander, donde fueron auxiliados y remolcados a puerto, según informa la agencia Efe. Los...

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Casi veinticuatro horas de angustia les costó a cuatro ciudadanos franceses que viajaban a bordo del velero Adore, volver a la tranquilidad después de que, en la tarde del pasado domingo, su embarcación perdiera el rumbo y navegara a la deriva por la asturiana bahía de Ribadesella durante toda la noche, la mañana y buena parte de la tarde de ayer.Finalmente, y después de haberle sido perdido el rastro por las fuerzas de rescate, los tripulantes lograron llegar por sus propios medios a la bahía de Santander, donde fueron auxiliados y remolcados a puerto, según informa la agencia Efe. Los cuatro navegantes se encuentran en buen estado de salud.

Asimismo, un grupo de siete montañeros de Palencia tuvieron dificultades en la localidad oscense de Canfranc al quedar aislados por el temporal de nieve. Dos de ellos, cuyo único equipaje era una botella y una linterna, tuvieron que pernoctar en un refugio mientras que el resto del grupo regresaba al pueblo y avisaba de lo ocurrido, según informa Javier Ortega.

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Tres transeuntes ovetenses pagaron ayer las consecuencias del fuerte viento que logró derribar el "Negrillo de la Reconquista", un olmo negro de 250 años de antiguedad y 20 metros de altura que sucumbió al vendaval, destrozando en su caída a nueve coches estacionados por sus propietarios en una zona con prohibición expresa de aparcar.

Trampa de hielo

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En Granada, cerca de cien automovilistas se vieron atrapados en un atasco de hielo, en la carretera que une Jaén con Guadix, desde la tarde del domingo y hasta la mañana de ayer, informa Europa Press.

La imposibilidad de sacar los vehículos de su trampa helada hizo que muchos de los afectados se quedaran a dormir en sus coches, mientras que otros prefirieron aceptar la hospitalidad de los vecinos de la localidad granadina de Guadalhortuna, que se prestaron a acoger a los automovilistas en sus casas, cercanas al lugar del atasco.

La nieve deparó, en cambio, un inesperado día de fiesta a cerca de 900 mineros de siete empresas de Palencia, que no pudieron acudir ayer a las explotaciones en que trabajan por la fuerte nevada caída durante la madrugada en el norte de la provincia, informa Javier G. Escudero. Los autobuses que trasladan a los mineros no pudieron llegar hasta los pozos al encontrarse cortadas las carreteras de acceso por la nieve y el hielo. Otras empresas mineras tuvieron que alterar el ritmo normal de trabajo por las bajas temperaturas.

Los que sí debieron pensar que aquello eran gajes del oficio son los técnicos de Televisión Española que viajaban en dos unidades móviles por la sierra madrileña en la mañana de ayer con el fin de, tomar imágenes de los efectos de la nevada en paisajes, pueblos y carreteras de la zona, cuando ellos mismos se quedaron atrapados en la carretera de Miraflores y tuvieron que esperar la llegada de las máquinas quitanieves para poder salir del atolladero en que se hallaban.

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