Tribuna:

Arrecian las ventas

La creciente presencia de papel ha definido esta sesión de apertura en la Bolsa, a pesar de que la actividad ha mejorado discretamente. Las instituciones prosiguen con su función de tapar huecos, mientras que el inversor particular desespera y, en muchos casos, decide asumir sus pérdidas vendiendo a precios de saldo. La jornada discurrió en medio de la más absoluta ausencia de intenciones compradoras aunque, a medida que bajaban las cotizaciones, se ganó en fluidez. Esta actividad parecía facilitada por el interés de los grupos financieros en dar liquidez a sus valores o por evitar una caída e...

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La creciente presencia de papel ha definido esta sesión de apertura en la Bolsa, a pesar de que la actividad ha mejorado discretamente. Las instituciones prosiguen con su función de tapar huecos, mientras que el inversor particular desespera y, en muchos casos, decide asumir sus pérdidas vendiendo a precios de saldo. La jornada discurrió en medio de la más absoluta ausencia de intenciones compradoras aunque, a medida que bajaban las cotizaciones, se ganó en fluidez. Esta actividad parecía facilitada por el interés de los grupos financieros en dar liquidez a sus valores o por evitar una caída excesiva de los precios. Como causa directa de esta nueva salida de papel, los operadores aludían al tono con que los dirigentes políticos se refieren, al conflicto del golfo Pérsico. La sola posibilidad de que la ONU dé el visto bueno a una intervención armada hizo que Wall Street abriera con un recorte de 30 puntos, lo que no hizo mas que acelerar la salida de papel en la Bolsa española.El índice de la Bolsa de Madrid, que a mediodía bajaba 1,3 puntos, terminó perdiendo 3,32, ante las presiones que llegaban del exterior y la absoluta falta de alicientes internos y todo ello a pesar de la resistencia que algunas entidades están oponiendo a la caída de las cotizaciones.

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